Marruecos y Mohamed VI solo conocen el lenguaje de la violencia

10/11/2010 - 00:00 Avelino González

La Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Guadalajara, consternada ante los acontecimientos que están sucediendo en El Aaiún, en los territorios ocupados del Sáhara Occidental, -no sabemos el número de heridos y/o muertos, ya que el gobierno marroquí ha desmantelado la cobertura de telefonía móvil para que el mundo no sepa nada de lo que está ocurriendo-, expresa su más enérgica condena ante la actitud del régimen marroquí, que una vez más muestra al mundo que solo conoce el lenguaje de la violencia, el odio y la violación de los derechos humanos. A pocas horas del inicio de las negociaciones entre ambas partes, auspiciadas por la ONU, y días después de que observadores y periodistas españoles fueran agredidos e insultados por agentes marroquíes, y de que parlamentarios/as del Estado Español y del propio Parlamento Europeo fueran expulsados de forma ilegal y arbitraria del territorio, en un claro intento de ocultar al mundo lo que se ha confirmado: el ataque indiscriminado por parte de unidades militares y policiales contra miles de civiles saharauis que pacíficamente reclamaban sus derechos económicos y sociales en el campamento de Gdaim Izik, más conocido como el Campamento de la dignidad, en los territorios ocupados del Sáhara Occidental. Unidades militares y policiales marroquíes han entrado en el campamento de protesta saharaui de Gdaim Izik, cerca de El Aaiún, con el objetivo de desmantelarlo por la fuerza, generando dolor y muerte, pánico y angustia entre los miles de hombres, mujeres y niños que pacíficamente se concentraban en el Campamento reclamando sus derechos más elementales. El Estado de Marruecos, con su actitud violenta y antidemocrática, vulnera normas tan básicas como la Declaración Universal de los Derechos Humanos que proclama en su artículo 19 como “todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”. El Reino de Marruecos incluso ignora su propio texto constitucional, cuyo artículo 9 dice textualmente: “se garantiza a todos los ciudadanos: la libertad de circular y de establecerse en todas las partes del Reino; la libertad de opinión, la libertad de expresión bajo todas sus formas y la libertad de reunión; la libertad de asociación y la libertad de afiliarse a cualquier organización sindical y política de su elección”. ¿Cuánta gente tendrá que morir?, ¿Cuánto horror habrá que ver para que la Comunidad Internacional proteja a la población civil saharaui? ¿Sigue el Gobierno Español constatando que la “legislación vigente” se aplica en el territorio del Sáhara Occidental? Exigimos a la Unión Europea y en especial al Gobierno Español, y a su Ministra de Exteriores que hagan un llamamiento urgente al Rey de Marruecos: para que ponga fin a esta acción represiva y de violencia injustificada, desproporcionada y cruel.