Miles de candidatos

La publicación de las listas electorales disipa dudas, rumores y curiosidades. Ya sabemos el nombre de los candidatos de los distintos partidos políticos en todos los municipios de España. Es motivo de alegría que los 313 pueblos tengan al menos una candidatura, lo que garantiza un alcalde, y en 310 de ellos, casi todos, podrán votar, al menos, entre dos alternativas. Gente joven con veteranos aportando experiencia en el cargo, se combinan en listas que demuestran que la política está viva, que son muchos los hombres y mujeres que se ilusionan y comprometen con sus pueblos. Lo hacen a costa de su tiempo libre, pues la mayoría deben continuar con sus profesiones porque no van a cobrar un céntimo y de las inevitables críticas de algunos.Para todos los que van en estas once páginas- en la edición impresa- que este viernes ofrecemos a nuestros lectores vaya nuestro respeto, agradecimiento y reconocimiento.   

    Los candidatos, miles de vecinos de nuestra provincia, prestigian la política más cercana, la local, con esta disposición a resolver nuestros problemas en el día a día. Y así ha de ser. En la política a niveles superiores- gobiernos centrales o regionales, con capacidad legislativa, y por tanto de establecer las reglas del juego, entendemos que debería avanzarse en la profesionalización. Habrían de ser expertos en las respectivas materias y no personas en excedencia de sus trabajos que muchas veces nada tienen que ver con las competencias que asumen (como un filósofo gestionando una pandemia). Lo más sensible queda en manos de no profesionales y nos parece bien. Criticamos a quienes se pasan toda la vida en política cuando sí valoramos, por ejemplo, la experiencia de un periodista o un médico. Sin políticos con talla las sociedades no pueden evolucionar bien. Es una cultura equivocada.