Mónica Bermejo: “El premio es compartido con todo mi equipo y con la gente que me ha votado”

10/04/2021 - 10:34 Alberto Moreno

La joven molinesa ha sido elegida por los lectores de ‘Nueva Alcarria’ mejor deportista de 2020.

Mónica Bermejo (Guadalajara, 31 de agosto de 2000) figura ya en la lista de mejores deportistas de la provincia, a juicio de los lectores de Nueva Alcarria. Es la ganadora del concurso popular de este año. La molinesa, jugadora del FS Azuqueca de Primera Autonómica fue la más votada en las dos primeras fases de la encuesta. Y por supuesto, también en la final. Se une así, en la lista de ganadores a la taekwondista Lydia García, el campeón del mundo de kenpo Emilio Mínguez y a la nadadora Marta Martínez.
    

Empecemos por el principio, ¿cómo fueron sus comienzos en el fútbol sala?, ¿por qué eligió este deporte y no otro?

Estaba en Molina y mis amigos por la tarde iban a jugar a fútbol sala y yo iba con mi padre a verles jugar casi todos los días, hasta que me apuntaron. Tenía cinco años y hasta ahora, siempre me ha gustado mucho este deporte. Hasta los 15 años jugaba con chicos y después se empezó a crear un equipo de chicas; entrenaba con los dos equipos y al final, me quedé solo con el equipo femenino. Poco a poco el equipo fue cogiendo nivel y un año llegamos a ser incluso segundas de Guadalajara.
  

 ¿Qué recuerdos tiene de sus entrenadores en los comienzos con el fútbol sala?

Teo es como un segundo padre para mí. Desde siempre me ha llevado él y todo lo que he hecho en el fútbol sala se lo tengo que agradecer a él, siempre me ha apoyado, igual que mi familia. Con las chicas tuve  a otro entrenador, Lauri, al que también le tengo que agradecer mucho su trabajo, aunque no creo que encuentre nunca a nadie como Teo.
  

 ¿Y cómo fue su convocatoria por la selección de Castilla-La Mancha?

Es muy curioso porque fui seleccionada cuando ya no había equipo de chicas en Molina. Yo seguía entrenando, incluso con chicos, pero no competía y me seleccionaron. Fue toda una sorpresa, confiaron en mí y el problema era que tenía que estar federada en algún equipo para poder ir a la selección y me hizo ficha el Ciudad de Guadalajara. Así pude entrenar y jugar con la selección y llegamos al Campeonato de España sub 17, que quedamos segundas. Es el mejor puesto que ha tenido Castilla-La Mancha en un campeonato femenino. Ganamos incluso al anfitrión, Cataluña, pero en la final, nos ganó Murcia.  
    

De ahí,  al Azuqueca FS hace ya tres temporadas, ¿por qué?

Cuando me vine a vivir a Guadalajara podía elegir Chiloeches o Azuqueca y algo me decía que era al equipo azudense donde tenía que ir. Y es que el segundo entrenador, Jhonai, llevaba años llamándome para jugar allí y por eso confié en ellos. Aquí estoy aprendiendo mucho con mi entrenadora Sara Porras. Su estilo es muy diferente al que tiene Teo pero me ha enseñado cosas muy importantes, cómo jugar con las piernas, pero también cómo saber competir. Tiene una garra impresionante.
    

Y llega el concurso de Nueva Alcarria y aparece entre las nominadas y finalmente ganadora, ¿lo esperaba?

En absoluto. Me acuerdo de que estaba estudiando unos exámenes y la entrenadora lo comunicó en el grupo del equipo y me pilló por sorpresa. Al instante me llamó Teo y mi madre también lo sabía. No tenía mucha información sobre el premio, pero según pasaban las semanas y las primeras votaciones me lo iba creyendo. Además, en estas primeras votaciones iba ganando con bastante solvencia y empecé a creer que podía ganar, pero la final estuvo muy empatada y emocionante.
    

¿Cómo ha vivido todo este proceso de casi un mes de votaciones?

La gente se ha involucrado un montón, sobre todo mi familia y en el equipo, todos. También muchos amigos que lo han pasado a sus amigos y a sus familias. Ha votado gente que no conozco de nada y me hace mucha ilusión. Pero del club tengo que dar las gracias a gente como Sara, Jhonai o Kita, que ha conseguido votos de jugadores de Primera división tanto de fútbol como de fútbol sala. Tengo que agradecer el apoyo a todos los que han perdido un minuto en votarme. Al final se han logrado más de 1.700 votos y eso es increíble.
    

¿A quién dedica este premio?

Se trata de compartir el premio porque yo practico un deporte colectivo y este premio es de todos, de mis compañeras, del cuadro técnico, del público incluso y sobre todo de la gente que me ha votado.
    

¿Ha estado pendiente de las votaciones día a día o ha esperado al final para conocer los resultados?

Estaba menos pendiente que mi familia o mis amigos. La gente de mi alrededor quería más el premio que yo por eso digo que es un premio de todos.
    

¿Cómo valora esta propuesta de Nueva Alcarria buscando el mejor deportista del año a juicio de sus lectores?

Es un galardón que premia una trayectoria deportiva. Es una forma de comprobar el apoyo de la gente y lo querido que es un deportista. Esto te motiva a seguir creciendo y como equipo nos motiva para seguir consiguiendo cosas.
    

¿Ha recibido muchas felicitaciones por el premio?

Muchas, en el equipo me vacilan  y luego me hizo mucha gracia porque empecé las prácticas de Fisioterapia –carrera que está estudiando– en el Hospital de Guadalajara  y una de las tutoras que me lleva me reconoció y me preguntó si era la del concurso de Nueva Alcarria. ¡Ufff!, me sorprendió mucho y me dio mucha vergüenza.

Volvamos a hablar de fútbol sala, ¿a dónde quiere llegar Mónica Bermejo en este deporte?

Siempre aspiras a lo máximo, pero mi sueño es con el equipo y eso pasa por subir con el Azuqueca a Segunda división. Cada año nos acercamos un poco más y este no lo hemos conseguido por muy poco. El sueño es jugar en la máxima categoría que se pueda en cada deporte. 
    

¿Cree que el fútbol sala femenino está suficientemente valorado?

No, pero no solo el femenino. El fútbol sala en general no está valorado, comparado con el fútbol-11 o con otros deportes. Hay muchos equipos y muchas competiciones, pero no suele trascender, pero incluso a nivel profesional cuesta ver informaciones sobre el fútbol sala. De ahí, hasta nuestra categoría, una Primera Autonómica, pues ya ni te cuento.