Para esto no hace falta la Unión Europea

Las ultimas recetas de la unión europea para la economía Española nos recuerdan que la unión continental de la que formamos parte se ha echado en brazos de los grandes capitales y ha olvidado a los ciudadanos. Sus imposiciones en mayo de 2010 en forma de reforma laboral no sirvieron para nada de lo supuestamente pretendían, reducción del desempleo, aumento de la estabilidad del empleo y mejor disponibilidad para generar riqueza y crecimeinto económico. Ahora nos proponen una reducción de las cotizaciones sociales a cargo de los empresarios y en compensación un aumento de los impuestos al consumo, incremento del IVA; subida de los combustibles.

   Estas propuestas suponen una transferencia de dinero desde los bolsillos de todos los ciudadanos a las empresas españolas. Si entre todos vamos a pagar las cuotas de los empresarios vía impuestos esto significa que las clases más bajas sufrirán mas presión fiscal a cambio de que las empresas tengan menos gastos sociales. Y todo esto tras haber pactado una reforma de pensiones que reduce el gasto en pensiones. Y una de las premisas del pacto era no tocar las cotizaciones sociales. Endurecer las condiciones para acceder al 100 % de pensión y reducir cotizaciones empresariales es socialmente injusto y una imposición de medidas regresivas y a favor de los grandes capitales. Esto además sería un reparto desigual de la carga de la crisis. Además un aumento del IVA deprimiría aún más el consumo con la repercusión directa en el empleo y atrasaría nuestras posibilidades de repunte económico y de trabajo neto. La Unión Europea con propuestas como éstas se convierte en el caballo de troya de los grandes capitales especulativos financieros, agencias de calificación, etc..

   La suma de propuestas como las enunciadas van configurando una Europa mas antisocial con mas desequilibrios sociales y una brecha mayor entre los que tienen y los no tienen, es decir los pobres serán más pobres y los ricos más ricos. Resulta vergonzoso que en vez de trabajar por armonizar las políticas fiscales, laborales etc. en todo el territorio europeo vayan dando recetas nacionales y se olvidan de homogeneizar los sistemas de protección social del norte de Europa a favor del sur o de establecer tasas europeas a las transacciones especulativas financieras, ésas sí serían sus funciones. La libertad de las transacciones financieras en todo el mundo sin reglas y sin orden han provocado esta crisis, y aún no hemos escuchado medidas contra los que provocaron la crisis. Proponen más neoliberalismo y desregulación cuando han sido estas políticas las que nos han llevado donde estamos.

   La construcción Europea nos ha traído mucho progreso en forma de fondos de cohesión pero esto es historia. El nuevo mapa de gobiernos europeos y su renuncia a plantar cara a los mercados nos posiciona a los ciudadanos del viejo simplemente como contribuyentes y se olvida del modelo social que imperó desde la segunda guerra mundial. Por no hablar del “papelón” del comisario europeo de la competencia Joaquín Almunia al que cada vez resulta más difícil llamarle socialista. Es normal que los gobiernos del estilo Merkel quieran imponer estas medidas pero se hace mas incomprensible que el grupo parlamentario socialista en el parlamento de Bruselas no tenga nada que decir. Cuando más necesitamos respuestas globales contra la crisis y que los ciudadanos vean que sus representantes nacionales y europos están preocupados por sus problemas, mas vemos que es totalmente al revés. Desde luego esto refuerza el desapego a la clase politica y con razón.

   En la actual coyuntura la Unión Europea tenía la oportunidad de reivindicarse como gobierno del conjunto de ciudadanos y promover medidas que impidieran que la crisis financiera contagiara a la economía productiva de los países. Incluso promover medidas como la dación en pago de las viviendas hipotecadas en caso de poder hacer frente a los recibos, algo que aliviaría a muchas economías familiares y no condenaría a miles de personas a pagar de por vida una casa que no tiene. Propuestas que le refuercen a favor de los ciudadanos frente a los mercados, protegiendo a los estados contra los ataques de los mercados. Si hubiera una fortaleza en el gobierno de la UE los mercados se lo pensarían dos veces antes de debilitar/tumbar las economías nacionales. cluso con nosotros que a veces no entendíamos muchas cosas que ellos nos comunicaban.

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