Pistas sobre el Museo

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Editorial

El Palacio del Infantado de Guadalajara, sede del actual Museo Provincial y Archivo Histórico de Guadalajara, recibía ayer la visita de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, y de la consejera de Educación, Ciencia y Cultura, María Ángeles García que junto al fotógrafo Ramón Masats recorrieron la exposición que se le ha dedicado desde el pasado mes de julio en las Salas del Duque.

 Aunque hubiera sido el momento ideal para anunciar aquello de que el Infantado podría llegar a convertirse en subsede del Museo del Prado, la ministra no quiso ser concisa y aunque no desmintió, tampoco afirmo. Habrá que aplicarse aquello, de que tiempo al tiempo. Sin embargo, pocas veces se ha visto a todo un representante ministerial pasearse por Guadalajara para deleitarse de una exposición colgada en tan insignes muros, algo que también podría considerarse como una señal. Pero pistas al margen, lo que ayer sí quedó claro es que el proyecto de mejora del Palacio sigue en pie, algo que después de las múltiples promesas hechas décadas atrás, ya es mucho. Por el momento, la intención del Ministerio de Cultura de convertir este edificio de la capital en un museo está supeditada a la terminación de la obra del nuevo Archivo Histórico y a la posibilidad de que se efectúe una reforma integral del Palacio del Infantado. Sin embargo, el pasado mes de julio, se conocía que el Gobierno central va a articular una partida de casi 13 millones de euros para acometer la rehabilitación integral del Museo. Si uno se pone a echar cuentas, lo cierto es que semejante suma no parece que se emplee en un museo cualquiera, lo que hace prever que de un modo u otro, sea o no subsede del Prado, el Museo de Guadalajara va a adquirir renombre a nivel nacional. Es cierto, que la ministra de Cultura sólo pudo confirmar la intención del Ministerio de seguir utilizando el Palacio del Infantado para exposiciones temporales, pero como decíamos anteriormente, ya es algo. Con lo cual bienvenida sea la inversión y, por supuesto, la visita.