Política videopornoporquería

18/11/2010 - 00:00 Fernando Jáuregui

Lo confieso: tengo mucho respeto por la clase política, aunque a veces no se note en algunos ácidos comentarios que ocasionalmente les dirijo. Creo que, hablando en términos generales, nuestros políticos superan la media de honradez europea, aunque no siempre sea así en lo referente a cualificación técnica, qué le vamos a hacer. Por eso mismo, porque proclamo siempre ese respeto y porque ataco esa descalificación generalizada y facilona que tanto se practica contra nuestra clase política, debo decir, con dolor, que me siento horrorizado ante algunas cosas que están ocurriendo en la campaña electoral catalana, que es la última manifestación de la actividad de algunos de nuestros políticos cuando están 'en su salsa'. Especial consideración he sentido siempre por la personalidad política y humana de Montserrat Nebrera, que ahora ha pasado al 'estrellato' (no se habla de otra cosa) no tanto gracias a su actividad en la campaña catalana y sus indudablemente interesantes mensajes, sino a un vídeo presuntamente 'porno' -que, naturalmente, no lo es; se trata apenas de un reclamo_. Y que, en mi opinión, no hace sino frivolizar una campaña que ya viene, de por sí, lo suficientemente anodina, descafeinada y artificial. Y ¿qué decir de ese otro vídeo de las Juventudes Socialistas Catalanas, igualmente pródigo en gritos orgásmicos? Y ¿qué de aquel otro, de las Nuevas Generaciones catalanas del PP, donde a la candidata Alicia Sánchez Camacho la hacían disparar bombillas a 'los ilegales'? Pues eso: una nueva campaña en la que no hay vídeos con perros 'doberman', pero sí falso sexo ante las urnas y violencia sobre gaviotas. Lo que no hay, eso sí, son debates 'cara a cara', y todos culpan al otro por ello. Tampoco hay, ya se ve, demasiadas ideas. Y de analizar la realidad catalana en profundidad, menos. Luego querrán que la gente, que me da la impresión de que se siente poco respetada, se precipite a votar el domingo 28...