Poner coto a la ‘lengua azul’

A pesar de ello, el Comité Nacional de Alerta Sanitaria Veterinaria (RASVE) decidió el pasado 3 de septiembre ampliar a toda España la vacunación obligatoria debido a la evolución de la enfermedad tanto en España como en países limítrofes, como Francia y Portugal. La enfermedad de la lengua azul, conocida también por el nombre de fiebre catarral, es un mal no contagioso que está causado por un virus patogénico que se transmite a través de la picadura de un mosquito, el culicoides obsoletis. Afecta fundamentalmente a ovejas y, en menor medida, a cabras, vacas y otros rumiantes. Aunque esta enfermedad no constituye ningún riesgo para el consumo habitual de carne, leche o derivados lácteos de este tipo de animales lo cierto es que ni usuarios ni agricultores ven con malos ojos esta campaña que, sin embargo, llega en el momento menos oportuno. De hecho, la vacunación podría provocar el parto de algunas de las ovejas que ya están preñadas, de cara a la campaña de Navidad y por eso, desde la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos (APAG) se insiste en la necesidad de que la Administración sea flexible a la hora de aplicar la medida que, por otra parte, no supondrá un gasto directo. No en vano, la Consejería de Agricultura aportará dos millones de euros al año, pues se vacuna dos veces en el primer año y posteriormente hay un recuerdo anual. Este esfuerzo se hará también en cuanto a la aplicación, algo que la Delegación facilitará lo máximo. De este modo se pone coto a la posible extensión de la enfermedad, algo que redundará en el bien de todos.