Presupuestos para Guadalajara

18/01/2019 - 12:28 Redacción

 Los presupuestos crecen un 2,8% respecto al año anterior y son los que mayor inversión destinarán a los pueblos en la historia de la Diputación con fondos propios. Peor suerte corremos con el PGE.

El próximo 23 de enero la Diputación provincial aprobará en Pleno unos presupuestos ambiciosos en cuanto a inversiones se refiere. Debido a una gestión económica que ha permitido en los últimos seis años saldar una deuda de 70 millones de euros, ahora se dispone de casi treinta millones para acometer inversiones en la provincia, sin descuidar las políticas activas de empleo a las que se destinará un 5% más, la ayuda a las zonas que más sufren la despoblación, el impulso al turismo mediante el respaldo a las fiestas de Interés Turístico Provincial, el CITUG de Torija o el Centro de la Cultura Tradicional de Atienza, y el gasto social firmando convenios con asociaciones que trabajan con los sectores de la población más desfavorecidos. También se avanzará en la implantación de la administración electrónica y en este año se patrocinará una etapa de la Vuelta Ciclista a España que pasará por varios pueblos de la provincia, y la capital, el 11 de septiembre. Los presupuestos crecen un 2,8% respecto al año anterior y son los que mayor inversión destinarán a los pueblos en la historia de la Diputación con fondos propios, un hito que supone un importante espaldarazo a un mundo rural en el que son muchos los retos, desafíos y problemas que resolver. Peor suerte corre la provincia con los Presupuestos Generales del Estado, en caso de que finalmente vean la luz. No aportan ningún nuevo proyecto y de ellos se descuelga, al no existir partida consignada, el BUS-VAO que iba a permitir una mejor comunicación con Madrid para los miles de coches que cada día se desplazan a la vecina comunidad. La mayor parte del dinero se destina para conservación de carreteras, la concesión de la R2 y alguna pequeña actuación en esta materia, con pequeñas asignaciones a obras como las murallas de Cifuentes, restauraciones en la catedral de Sigüenza o el Palacio del Infantado. Tan solo cabe destacar la inversión en el Observatorio de Yebes y en el abastecimiento a núcleos aledaños a Entrepeñas y Buendía, que al menos muestran sensibilidad con esta zona afectada por un trasvase que confiamos en que vaya acercándose a su final, una de las mayores expectativas creadas por el nuevo Gobierno nacional. Decepcionantes, en definitiva, cifras, frente a las inversiones millonarias anunciadas para otros territorios de España.