Primer paso
01/10/2010 - 09:45
APUNTES
La receptividad mostrada ayer por el Ministerio de Justicia y el Consejo del Poder Judicial hacia la mayoría de las reivindicaciones de las asociaciones judiciales que amenazan con convocar una huelga indica un cambio de tono susceptible de generar un clima más propicio a la consecución de un acuerdo entre las partes en conflicto.
La disposición gubernamental a la negociación, junto al reconocimiento de lo fundado de muchas de las reclamaciones contenidas en la plataforma de los jueces, parece más conveniente que las primeras descalificaciones lanzadas contra los mismos por el ministro Fernández Bermejo. Pero esa modulación del mensaje también pone en evidencia la falta de comunicación y de diálogo previos que, impulsados por ambas partes, deberían haber evitado llegar al actual clima de confrontación; especialmente cuando viene a existir una coincidencia en la necesidad de imprimir una transformación radical a la Administración de Justicia. La mano tendida compromete ahora a las asociaciones judiciales, aunque su apuesta por la huelga carezca de partida del necesario amparo legal.