Reivindicaciones de la Justicia

16/11/2018 - 13:09 Redacción

Hay que escuchar el clamor de la sociedad por una real separación de poderes. 

Este viernes, 16 de noviembre, hay convocada huelga general de la administración de Justicia. El lunes, 19, son los jueces y fiscales quienes ejercerán este mismo derecho y el pasado martes fueron los secretarios judiciales los que hicieron paros parciales. Durante esta semana ya  ha habido concentraciones de los funcionarios previas a la jornada de protesta a la que están llamados hoy, centrada en la oposición a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que supone, en opinión de los convocantes, una pérdida de derechos laborales. Al margen del fondo del conflicto, con discrepancias salariales y de movilidad, principalmente, es preciso abogar por un mayor diálogo y porque los profesionales que trabajan por la Justicia se sientan y estén bien pagados, no existiendo desigualdades por motivo del territorio. Una parte de la reivindicación de jueces y fiscales, tiene también contenido económico, que se debe sustanciar, pero otra, la que más afecta a los ciudadanos y al sistema, es la referida a la necesidad de un incremento en los medios humanos y materiales para ejercer esta función de gran responsabilidad. Se debe aumentar el presupuesto en Justicia. Es un pilar básico para garantizar la protección de los derechos  de las personas y no se pueden alargar en el tiempo situaciones, por ejemplo, como la del juzgado de Instrucción Nº 1 de Guadalajara que no tiene titular desde el 16 de octubre y en el que se cubren las funciones con suplencias de otros jueces cuando existe una importante carga de trabajo. Sobre la mesa existe, por otra parte, la petición de crear plazas de fiscal y nuevas unidades judiciales. En Guadalajara, como señala el TSJCCM, hacen falta nuevos juzgados de instrucción. Por otra parte hay que escuchar el clamor de la sociedad en su conjunto para conseguir una real separación de poderes, la independencia entre la política y el mundo judicial. La cúpula politizada o que sufre de injerencias políticas desacredita el buen trabajo de la mayoría de los jueces a favor de los ciudadanos. El Consejo General del Poder Judicial debe ser elegido en parte por las cámaras y en parte por los propios jueces por un principio de equilibrio como establece la Constitución, pero es momento de llegar a un replanteamiento sobre los sistemas de designación o elección con amplio acuerdo de los políticos, para prestigiar la Justicia y a sus profesionales.