Todo pasa y todo queda
01/10/2010 - 09:45
El comentario
FERNANDO ALMANSA, Periodista
Ahora que la fiesta de todos los santos está a la vuelta de la esquina y todos miramos hacia atrás para recordar a los que nos dejaron y reflexionar sobre la brevedad de la vida, es bueno también mirar hacia delante y poner en proyección lo que pasará en los próximos años, y cómo nos afectará en nuestra vida, o cómo no nos afectará.
Mientras aquí se celebra la festividad de todos los santos en Estados Unidos se está en una histérica carrera final electoral, que apunta de forma clara a un Obama presidente; y con él las grandes esperanzas de la humanidad, pero quizá todo quede en agua de borrajas, porque en medio de la crisis financiera, en medio de las proclamas del capitalismo salvaje, en medio de la verborrea incontenida de algunos expresidentes y sus demenciales declaraciones sobre el medio ambiente. En medio de toda esta cacofonía, probablemente todo quede en nada, y todo vuelva a ser lo mismo, los mismos perros con distintos collares: más capitalismo destructor, más imperio fundamentalista y más guerras contra fantasmas terroristas.
¡Ojalá que no!, ojalá que Estados Unidos cambie de una vez la dirección de su timón, se comprometa con la paz mundial, con el medio ambiente y con los Derechos Humanos. Ojalá Obama sea el profeta esperado que calle a inconscientes gobernantes, a Berlusconis, Aznares, Bushes y la cohorte de rufianes que han engrosado sus bolsillos, a costa de los ahorros de los trabajadores, y ahora vacían las arcas públicas. Ojalá que el paraíso esté en la tierra a la vuelta de la esquina, ojalá, ¡Inshalá!.
Pero entre tanto, yo me quedo con la poesía de Machado y con su todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, o con la lapidaría frase de polvo eres y en polvo te convertirás... y entre crisantemo y crisantemo; entre recuerdos de seres queridos, y añoranzas pasadas, lo mejor es vivir el presente, comprometerse con el futuro y el cambio necesario, individualmente y no dejarlo a manos de supermanes salvadores, y confiar en que los dráculas planetarios que tanta sangre han chupado a pobres y trabajadores, dejen de circular por este Halloween permanente en que se ha convertido el mundo, y se mueran de una vez por todas si reencarnación y descansen en paz, y nos dejen en Paz.
¡Ojalá que no!, ojalá que Estados Unidos cambie de una vez la dirección de su timón, se comprometa con la paz mundial, con el medio ambiente y con los Derechos Humanos. Ojalá Obama sea el profeta esperado que calle a inconscientes gobernantes, a Berlusconis, Aznares, Bushes y la cohorte de rufianes que han engrosado sus bolsillos, a costa de los ahorros de los trabajadores, y ahora vacían las arcas públicas. Ojalá que el paraíso esté en la tierra a la vuelta de la esquina, ojalá, ¡Inshalá!.
Pero entre tanto, yo me quedo con la poesía de Machado y con su todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, o con la lapidaría frase de polvo eres y en polvo te convertirás... y entre crisantemo y crisantemo; entre recuerdos de seres queridos, y añoranzas pasadas, lo mejor es vivir el presente, comprometerse con el futuro y el cambio necesario, individualmente y no dejarlo a manos de supermanes salvadores, y confiar en que los dráculas planetarios que tanta sangre han chupado a pobres y trabajadores, dejen de circular por este Halloween permanente en que se ha convertido el mundo, y se mueran de una vez por todas si reencarnación y descansen en paz, y nos dejen en Paz.