Un buen trabajo en seguridad
13/03/2014 - 23:00
Toda precaución es poca ante los amigos de lo ajeno. Este mismo miércoles advertían de que por el centro de Guadalajara se sustraen carteras con gran habilidad. Se aconseja no llevarla en el bolsillo trasero de los pantalones y llevar cuidado con los encontronazos o empujones donde los hábiles maestros del hurto hacen su pequeño número de magia. La pillería ha subido. También, en la calle, aunque no parece reflejarse en un aumento de las denuncias, se habla de robos en pisos durante la ausencia de sus moradores. Al parecer saben bien los horarios y hábitos después de vigilar durante un tiempo. Todo ello exige extremar medidas como la conexión de una alarma, puertas blindadas, rejas o buena relación con los vecinos que adviertan de ruidos en tu casa. Precisamente esa colaboración ciudadana avisando a la Policía o Guardia Civil, dependiendo del lugar, de la comisión de faltas o delitos contra la propiedad cuando están sucediendo es una de las grandes bazas contra la delincuencia que permite numerosas detenciones o esclarecimiento de los sucesos.
Esta semana se informaba del éxito de una operación en la que se han detenido a los tres responsables de un total de setenta y cinco robos que habían creado gran alarma social en la urbanización Nueva Sierra de Albalate de Zorita. También se ha interceptado a dos personas por tres robos con violencia y dos delitos de hurto de vehículo y ha habido detenciones por timos en la teleasistencia. Son muchas las investigaciones que llevan a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, así como sus labores de vigilancia y controles preventivos. Su profesionalidad y alto grado de eficacia permite tener cierta confianza y tranquilidad, que no debe llevar a la relajación. Hay que poner todas las dificultades imaginables a quienes quieren quitarnos lo nuestro y colaborar en lo que podamos con los defensores del orden informando de lo que veamos y de lo que nos parezca extraño o sospechoso. Las infracciones penales se están reduciendo y no hay más denuncias que otras veces, pero las espadas siempre tienen que estar en alto.