Un gobierno inmoral
20/02/2014 - 23:00
actual Gobierno del PP es un gobierno profundamente inmoral. Inmoral porque antepone los intereses de los mercados los derechos y necesidades de las personas. Lo dijo de forma vergonzosa su portavoz Esteban González Pons hace unos días, que declaró con total chulería que hasta ahora se habían preocupado por la prima de riesgo y ahora empezarían a preocuparse de las personas. Su presidente Mariano Rajoy es un inmoral, por decir de forma festiva en su macro congreso que había quien decía que la crisis se llevaría por delante a España, pero es España la que se va a llevar por delante a la crisis. Su concepto de España es patético, parece no saber que la crisis y las políticas de este gobierno sí se han llevado por delate a una buena parte de España, porque se ha llevado a una buena parte de españoles, sin trabajo, sin hogar, desahuciados emigrantes a la fuerza, sin servicios sociales esenciales, etc.. ¿Qué es España para ti Mariano Rajoy?, es una marca, como la Coca Cola
. Este Gobierno y sus cargos directivos parecen haber olvidado los derechos básicos de las personas. Cuando pretenden modificar la legislación sobre justicia Universal, aduciendo a los problemas diplomáticos, y se olvidan que la diplomacia es para favorecer las relaciones entre los pueblos, no para enmascararlas, o defender los intereses comerciales de los grupos capitalistas. Cuando Ruíz-Gallardón sigue actuando como un colegial listillo y apela a su moral católica para imponer aspectos personales sobre una sociedad laica y derivar así la atención de los gravísimos problemas que padecemos, le digo, te digo Alberto, como católico practicante que soy, que es inmoral tu actitud e indigna. Cuando el director de la Guardia Civil declara que los pelotazos de goma a los inmigrantes en la costa, fue un procedimiento normal de rechazo en frontera, parece olvidar que hay unas garantías de derechos mínimas que deben ser respetados. Es inmoral. Es inmoral que se tapen las cuentas del PP y sus casos de corrupción, es inmoral que las instituciones, sea la corona, los partidos políticos o cualquier otra valgan más que las personas. Son inmorales de cabo a rabo. Sobran todos los partidos que juegan al poder y no al servicio de la sociedad, sobran todas las instituciones que se anteponen a los derechos de las personas. Sobra la marca de España y falta el país de paisanos y paisanas españoles. Tendrán la ley, pero no tiene la moral.