Una provincia unida por autobús

02/02/2014 - 23:00 Redacción

Hace casi ya cuatro años que el Gobierno regional, por entonces de signo socialista, tuvo la feliz ocurrencia de conectar a los municipios más poblados de la provincia con distintas líneas de autobús que al mismo tiempo permitieran pasar por la capital. Hasta quince municipios se adhirieron a aquel nuevo servicio que sería conocido como Plan Astra y que beneficiaba a miles de vecinos del Corredor y la Campiña. La polémica surgiría pronto por culpa de la falta de entendimiento que se produce cuando dos administraciones son gobernadas por distintos partidos y llevaría a aquellas tristes imágenes de conductores que por cumplir con su trayecto eran multados al parar en determinados lugares de la capital, lo cual terminó en los juzgados y acaba de ser resuelto. Tampoco todas las paradas que se hacían tenían demasiado sentido por los pocos viajeros que iban en algunas de ellas. Finalmente el nuevo Gobierno regional, en 2012, llevaría a cabo una reestructuración con el acuerdo de los ayuntamientos y el visto bueno de las empresas que prestan el servicio para ajustar todo a la demanda real de los usuarios. El resultado de las modificaciones fue un menor coste para el erario público y un mayor grado de conformidad, por tanto más eficiencia y mejor servicio. A esta se añadieron después cambios en la línea de Alovera, Quer, Villanueva de la Torre y Azuqueca porque los vecinos no estaban conformes con sus frecuencias y horarios. Unas 164.000 personas viven en los 13 municipios que se interrelacionan con esta red de líneas. Los que más cerca están de la capital más vienen a ella y la de Humanes sirve para enlazar con las líneas que fuera de este plan llegan a la Sierra Norte, por lo que la zona más alejada también se beneficia. El balance presentado es positivo por el incremento de viajes experimentado que demuestra el acierto en los cambios y sobre todo la utilidad del servicio, que es el dato fundamental. Las frecuencias, paradas, rutas y horarios deben adaptarse a las necesidades. Para ello hay que dialogar, gobierne quien gobierne en cada lugar.