Una realidad que no se puede olvidar

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por:
Ortiga
De vez en cuando nos tienen que recordar que aunque las cosas no vayan demasiado bien por el primer mundo, en los llamados países del tercer mundo o en desarrollo la cuesta que tienen que subir es mucho más empinada y larga que la nuestra. Ayer precisamente fue la delegación de Intermón Oxfam en Guadalajara la que con la celebración del Día de la esperanza en el parque de La Concordia, con la organización de talleres, venta de productos de comercio justo y actividades de animación, nos recordó esta situación y que con pequeños gestos se puede hacer una gran labor para que estos pueblos puedan avanzar y desarrollarse con sus propios recursos y de forma especial con el apoyo y la solidaridad de los países desarrollados.
Los entendidos en esta materia del desarrollo intentan demostrar que las generaciones actuales tienen en sus manos conseguir que la pobreza y las desigualdades sean menores, pero cuesta creerlo aunque el apoyo anónimo y desinteresado de muchos ciudadanos permite que el tercer mundo no quede en el olvido para las sociedades modernas y avanzadas.