Viejo truco, nueva trampa

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

El comentario

Sólo hay una diferencia, tanto bajo las capuchas como en su traje político de camuflaje: su debilidad creciente, la impotencia de sus dirigentes, la sensación de derrota de sus militantes y la sensación de derrota de sus seguidores. Esa es la gran diferencia. Y en el lado de la democracia, lo contrario: que puede derrotarse a ETA y, además, que se está cerca de lograrlo.

 Ese es un cambio sustancial puesto que lo que se escondía en las entrañas del malhadado proceso de paz era en el fondo que éramos incapaces de lograrlo y que no quedaba otro remedio que negociar.

Pero lo demás, esta parafernalia de comunicados y capuchas es más de lo mismo. Las terminales políticas declaran que quieren que los armados cesen en violencia y sus mentores terroristas se apresuran a decir lo pactado, que "alto fuego" al ya te veré y hasta que me fortalezca y me de la gana. En todo ello sólo hay un objetivo: seguir en los ayuntamientos, que es lo que como consecuencias del ya citado y nefasto "proceso" consiguieron colándose en más de 40 porque el Gobierno, al no impugnar sus listas ante los tribunales, les dejó hacerlo. Recuperada a fuerza de explosiones la cordura y la firmeza, ETA ha ido de derrota en derrota, hasta verse policial, política y socialmente acorralada. Están, por fortuna para la vida y la libertad, y saben que la perdida de ese poder municipal supone el casi definitivo ocaso de su propia existencia. A ello y sólo a ellos encaminan todas estas maniobras. Y por ello hemos de saber que es ahí esta la trampa y la prueba del nueve, es ahí donde radica y a donde se dirige todo el engaño en el que bajo ningún concepto puede caer el Gobierno.Lo único que vale para que puedan aspirar a coger "la papeleta" es que entreguen "la pistola", que ETA desaparezca y que las formas de extorsión, violencia, chantaje e intimidación de sus tentáculos los hagan con ella. Disolución y entrega de armas y no hay más gaita que valga. No es creíble y sería una vez más darle un balón de oxigeno cuando se están literalmente asfixiando. Que no son "dos" que ETA es una sola con todos los tentáculos que puede. Porque hay que ir a los hecho y dejarse de retóricas. Y los hechos son ese ayuntamiento de Hernani en protesta porque ¡se había detenido al asesino de Pagazaurduntua!, el socialista y policía local ejecutado de un tiro en la nuca. Y HB, claro, clama contra tamaño atropello. Eso es HB, se llame como quiera, y es simplemente porque es nada más pero tampoco nada menos que la misma ETA con otra careta.

La trampa ha sido cebada, los tiempos y apariciones de uno y otro, perfectamente medidos y escenificados. Espero, fervientemente, que un Zapatero en estado de necesidad no piense de nuevo en coger tortuosos atajos y con ello en vez de avanzar hacia lo imprescindible, la derrota absoluta del terrorismo, se le abra la puerta última que ahora debemos cerrar y les permitamos coger otra vez poder, fuerza y dineros: los ayuntamientos. Es ahí donde les duele, es ahí donde saben que pueden perder el último cartucho que les queda. ¡Por Dios! No se lo demos para que puedan volver a recargar la pistola.