Villel en reconquista

22/06/2019 - 12:25 Antonio Yagüe

El 29 de junio el objetivo será 'tomar' la vieja fortaleza del siglo XII.

No se rueda ninguna película ni es un viaje en el tiempo. Pero el 29 de junio en Villel de Mesa (Guadalajara) pueden confundir a propios y extraños las vestimentas, estandartes, banderas, dulzainas, fuegos artificiales y un banquetazo con viandas al estilo medieval que congregará  a doscientos amigos del Castillo de los Funes.  Objetivo: ´tomar´ la vieja fortaleza del siglo XII, hoy propiedad del Ministerio de Hacienda, y revitalizar el valle con su riqueza natural e histórica.

La Administración es la dueña, como de otras muchas fortificaciones medievales, tras una orden ministerial de hace 60 años si nadie las reclamaba. No les preocupa a los 210 socios de la Asociación de Amigos del Castillo de Villel. Pero su presidente, Miguel Zamora,  reconoce que “sin permiso de la propiedad no se puede hacer nada”.  Los villeleros persiguen  evitar peligrosos y amenazantes  desprendimientos, mantener su estructura, que se arregle y reconstruya. Esperan respuesta oficial en breve.

  Sus planes son hacer visible el enclave como centro de interpretación del rico patrimonio del Valle del Mesa. Cuenta con asentamientos neolíticos y visigodos, vestigios de una calzada romana, y el paso de dos caminos desde Sagunto, uno de peregrinos a Santiago y otro de arrieros a Sigüenza. También posee zonas de gran valor ecológico declaradas ZEPA y es parte esencial del Geoparque. 

Castillo roquero de estructura sencilla pero con silueta sobrecogedora, moro y cristiano en territorio fronterizo, castellano y aragonés durante la guerra de los Pedros (I de Castilla y IV de Aragón), se hizo imprescindible para controlar el paso junto al río Mesa. Hasta sus dueños los Funes, caballeros de origen navarro, unas veces servían al rey de Aragón y otras al de Castilla.  La historia-leyenda recoge la orden de Isabel I de destruir el vecino Castillo del Mesa por haber apoyado a la Beltraneja, y la ofensiva avasalladora hacia Molina de las tropas de Napoleón.

No todos saben que junto a doce pueblos de Guadalajara, Soria y Zaragoza, Villel preside el sabinar más extenso de Europa de la sierra de Solorio. Colindante a Labros, de niño me fascinaba, hasta que lo hallé, el cornijal exacto con Iruecha y Sisamón donde mi padre decía que en una mesa podrían comer tres gobernadores sin salir de su provincia. O tres presidentes autonómicos bien avenidos.