Zapatero viajó a Afganistán

07/11/2010 - 00:00 José Cavero

No faltará quien diga que el presidente del Gobierno aprovechó la estancia del Papa en España para viajar a Afganistán, para no coincidir con él, o para repartir con él la actualidad y el protagonismo... No hay que olvidar que el jefe del Gobierno español tiene previsto despedir al Papa este domingo en Barcelona, al término de la segunda parte de la visita papal, tras la consagración de la Sagrada Familia. Pero tanpoco hay duda de que la visita del jefe del Gobierno español cogía a casi todos por sorpresa. No es habitual que los viajes de las máximas autoridades tengan anuncio previo, por razones de seguridad. Y de este modo, teníamos noticia del viaje cuando ya se estaba realizando, y cuando José Luis Rodríguez Zapatero aseguraba a las tropas desplegadas en Afganistán que permanecerán en el país el tiempo que sea necesario: "No estamos aquí para quedarnos, pero nuestro compromiso debe ser firme, hasta que los afganos puedan garantizar su propia seguridad". Zapatero lanzaba este mensaje a los soldados que trabajan en la base de Qala i-now, situada en el oeste del país y a la que llegó acompañado de las ministras de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, y de Defensa, Carme Chacón. El jefe del Gobierno español aseguraba a las tropas: "No estamos aquí para quedarnos, pero nuestro compromiso debe ser firme, hasta que los afganos puedan garantizar su propia seguridad. Ellos habrán ganado un futuro mejor y todos habremos ganado un mundo mejor", dijo. Tras pasar revista a las tropas, Zapatero se dirigió a los soldados para reconocer su trabajo en un escenario "duro, difícil y muy arriesgado", y para elogiar "una tarea ardua que va a exigir tiempo". El presidente del Gobierno viajó en la noche del viernes, por sorpresa, para realizar ésta su segunda visita a las tropas españolas desplegadas en el país y la primera en los últimos cinco años. La única vez que Zapatero había estado en Afganistán fue en diciembre de 2005, cuando España acababa de desplegarse en la provincia de Badghis, convertida hoy en el epicentro de la presencia española en Afganistán. Entonces le acompañó el ministro de defensa José Bono. En esta ocasión, al jefe del Ejecutivo le han acompañado la nueva ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, y la de Defensa, Carme Chacón. En el caso de Jiménez, que lleva sólo dos semanas en el cargo, es su primera visita a la misión y uno de sus primeros viajes al extranjero como jefa de la diplomacia española. Por su parte, Chacón regresa al país sólo cuatro meses después de su última visita, el pasado mes de julio. La visita del presidente del Gobierno remarca su renovado interés por la misión. Tras mucho tiempo sin tratar el asunto, el pasado mes de septiembre compareció en el Congreso en un pleno monográfico sobre Afganistán. Además, el viaje se produce en un momento clave para la misión, pocos días antes de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN que se celebrará en Lisboa los próximos días 19 y 20. En esa reunión, los aliados tienen pensado elaborar un primer calendario de retirada de Afganistán, con el objetivo de comenzar el traspaso de la seguridad al Ejército y la Policía afganos a mediados de 2011. Un plan que será respaldado por España, cuya provincia bajo su responsabilidad, Badghis, es una de las que figuran en los primeros puestos para iniciar este proceso, de tal manera que las previsiones más optimistas apuntan a que el año que viene el Gobierno podría reducir el contingente, que en la actualidad forman 1.500 militares. Además, Zapatero, Chacón y Jiménez aterrizarán en Qala-e-Now apenas dos meses después de los graves incidentes que se produjeron en la ciudad el pasado 25 de agosto, cuando un infiltrado en la Policía afgana asesinó a dos guardias civiles y a un intérprete español, y posteriormente una turba asedió la antigua base española en Qala-e-Now y atacó los símbolos de la presencia de nuestro país en la ciudad. Desde entonces la situación ha vuelto a la calma, aunque los incidentes se siguen produciendo. Este mismo lunes, un vehículo español sufrió un ataque con un artefacto explosivo al norte de la localidad de Muqur, aunque todos los soldados salieron ilesos. En Kabul, Zapatero se entrevistó con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, y con el comandante de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (Isaf), la misión de la OTAN en el país, el general estadounidense David Petraeus. Pero antes se reunió con el gobernador de la provincia de Badghis, para luego pasar revista a las tropas y visitar el hospital que gestiona la cooperación española en la comunidad. Se trata de un viaje que no había sido anunciado por motivos de seguridad, una visita que en un principio estaba prevista para el pasado miércoles y que fue aplazada debido a la situación metereológica. El presidente llegó a Kabul sobre las 3.15 de esta madrugada (hora peninsular española), y antes de partir hacia la base española de Qala-i-Naw -donde están instalados más de mil de los soldados desplazados- realizó en el mismo aeropuerto un homenaje al monolito que recuerda a los 94 españoles fallecidos desde que se inició la operación en el año 2002.En la primera visita de Zapatero hace casi cinco años la presencia española en el país se limitaba a unos 500 soldados. Ahora hay más de 1.500 efectivos. Y tal y como ha recordado ahora a los soldados, por ahora no existe un calendario de salida para las tropas españolas, que cumplen su misión en la provincia noroccidental de Bagdhis.