Ortiz de Echagüe

30/06/2018 - 13:41 José Serrano Belinchón

Su afición a la fotografía fue una actividad que compaginó con la gestión empresarial. 

Nunca había oído hablar de este benemérito caballero, nacido en Guadalajara en 1886 y fallecido en Madrid noventa y cuatro años después. Cuando lo descubrí no dudé en echar un vistazo en su biografía, tanto como ingeniero aeronáutico, como por su afición a la fotografía, e inmediatamente lo incluí en el “Diccionario de Guadalajara” con todos los honores y merecimientos. Se trata del que fuera fundador de la Constructora Aeronáuntica S.A. y presidente de SEAT, empresa automovilística conocida por todos.

            Se formó en la Academia de Ingenieros Militares de Guadalajara, y cumplió su destino en el norte de África como responsable del servicio de fotografía aérea. Retrató al rey Alfonso XIII y consiguió la maravillosa placa titulada Sermón en la aldea, con treinta segundos de exposición. En 1916 dejó a un lado su oficio de piloto para dedicarse a empresario aeronaútico estableciéndose en Madrid, donde comenzó fabricando bombas aéreas e inició las gestiones para montar toda una empresa aeronaútica, de la que en 1923 saldría el primer avión metálico de fabricación nacional.

            En plena guerra civil reinició la reconstrucción de la compañía con una importante ampliación del capital, se adquirieron nuevas maquinarias y se construyó una factoría en Sevilla. Terminada la guerra, el Estado entró como accionista con una pequeña aportación y CASA pasó a ser parte del grupo empresarial del Instituto Nacional de Industria. En 1950 el INI lo nombró, además, presidente de SEAT, compañía automovilística de la que fue consejero hasta 1976, y presidente de honor a perpetuidad.

Su afición a la fotografía fue una actividad que compaginó con la gestión empresarial. Sus fotografías fueron expuestas en casi todas las importantes ciudades europeas; siendo la revista “Américan Photography” la que al final de los años treinta, lo consideró como uno de los tres fotógrafos más importantes del mundo. En sus archivos coleccionó decenas de miles de negativos sobre temas humanos y artísticos, y más de mil positivos. Ilustró los libros Spaniche Kopfe yEspaña, tipos y trajes. La Universidad de Navarra conserva todo ese material donado por sus herederos.