Abre al paso la totalidad de la calle Mayor tras ocho meses

  Una remodelada, moderna y cómoda calle Mayor puede desde ayer pasearse de arriba abajo después de la colocación de la última baldosa de esta carismática vía capitalina. Cerca de dos millones de euros han sido necesarios para el arreglo integral de su entorno. Un día después de finalizar las Ferias y Fiestas de la capital del pasado año, las máquinas hacían aparición en la calle Mayor para iniciar un profundo y laborioso proyecto de remodelación que acabó ayer con la colocación “de la última baldosa”, tal y como señala el concejal de Urbanismo, Juan Antonio de las Heras. Primero se actuó sobre el tramo peatonal para iniciar posteriormente en la zona donde también se permitía la circulación de vehículos. Aunque hubo polémica acerca de la terminación de la primera fase de esta obra, finalmente, el constructor consiguió acortar los tiempos para abrir antes de la llegada de la Navidad del pasado año e interferir lo menos posible en la mejor época de ventas para el comercio de la zona. En paralelo a la reforma de la calle Mayor se ejecutó también el arreglo de la plaza del jardinillo, de otras calles aledañas, como Montemar, Juan Miranda o la plaza de López de Haro. El resultado de esta importante inversión en el casco histórico, la más cuantiosa de su historia, ha sido un remodelado centro, moderno, acorde a la personalidad de la ciudad, más accesible, cómodo y turístico. En paralelo, la plaza Mayor iba avanzando en su obra de construcción de un aparcamiento subterráneo y en su superficie sólo quedan pequeños remates por concluir, como la instalación de una fuente de agua en la esquina donde se han protegido varios árboles.