Accem pide más inversión en las personas y menos beneficencia
En el Día internacional de la lucha contra la pobreza, las organizaciones sociales que trabajan día a día con los que menos tienen recuerdan que la pobreza sigue creciendo y cada vez son más las personas que no cuentan con recursos para cubrir las necesidades básicas.
En Castilla-La Mancha 670.000 personas son pobres o se encuentran en riesgo de exclusión social, según datos aportado por Braulio Carles, presidente de la Asociación Comisión Católica Española de Migraciones (Accem) de Castilla-La Mancha y vicario episcopal de Pastoral Social en la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara. Representan el 31,7 por ciento de la población. Esto sitúa a la región en la tercera más pobre y en penúltimo lugar en cuanto a la renta mínima.
Otras cifras que contribuyen a ilustrar la situación por la que atraviesan miles de familias es el de aquellas que no pueden pagar su hipoteca y corren el riesgo de perderla. En Guadalajara fueron 418 en 2008 y en 2012 rondaron las 680. También resulta significativo que en el primer semestre de 2012 en Guadalajara se produjeran 550 desahucios.
Carlés, que ha ofrecido estos datos en rueda de prensa acompañado de representantes de Cáritas, Manos Unidas y GuadaAcoge, ha alertado sobre el riesgo de una segunda oleada de empobrecimiento con efectos mucho más intensos, en la que puede derivar esta crisis fruto de una falta de atención integral a las personas que están quedando excluidas del sistema.
Por ello, en un día tan destacado, hizo un llamamiento a las administraciones para que hagan un mayor esfuerzo e inviertan en las personas. La asistencia de las necesidades básicas, que a nadie le falte un plato de comida ha dicho es necesaria, pero no podemos caer en el asistencialismo. Si sólo nos preocupa dar de comer habrá personas empobrecidas de forma crónica y no podrán salir de esa situación.
Considera necesario huir de la simple beneficencia e invertir en políticas sociales. Como parece ser que estamos saliendo del túnel, como están diciendo, apostemos más por una política social porque en este momento es muy necesario apostar por la personas, porque muchas se han quedado en la cuneta y habrá que sacarlos, habrá que invertir más en ellos, desde la asistencia, desde la promoción , pero nunca desde el asistencialismo o la beneficencia.
También ha apuntado la necesidad de recuperar la inversión en cooperación al desarrollo.
Por otro lado, ha indicado que aunque los políticos hablan de recuperación económica, refiriéndose a cifras macroeconómicas, esto no se está dejando notar todavía en el día a día. De hecho, el comedor solidario sigue atendiendo a diario a unas 350 personas. Aquí no se ha notado todavía, espero que a medio plazo se note, ha señalado.