Andrea Dieci ofreció un mágico concierto en Sigüenza

07/06/2016 - 12:31 Javi López

Andrea Dieci fue el protagonista del primer concierto del ciclo organizado por la Asociación Romanillos-Harris. El reconocido músico italiano, autor de 10 discos, deslumbró a todos los asistentes con el sonido de su guitarra Romanillos.

El intérprete milanés Andrea Dieci emocionó ayer al público seguntino de la Ermita de San Roque en un concierto mágico, que muchos asistentes escucharon con los ojos cerrados, dejando que el sonido de la guitarra, construida por el lutier afincado en Sigüenza, José Luis Romanillos, acariciara sus sentidos, como él hacía con las cuerdas de un instrumento al que tiene en su más alta estima.

 

Minutos antes de la actuación, con un programa elegido para la ocasión en el que mezcló el repertorio actual con el que gira por Europa con la inclusión de obras de dos músicos españoles, Fernando Sort y Frederic Mompou, Dieci hablaba de la relación con su guitarra. “Su sonido es especial. La tengo desde hace 27 años y es la mejor que he tocado nunca, solo comparable a otras fabricadas por Romanillos”, decía ayer.

 

Asimismo, la relación entre maestro guitarrero e intérprete también viene de lejos. “Conozco a José Luis Romanillos desde hace 32 años, cuando yo tenía 15. Para mí es un honor saber que le gustan mis interpretaciones, porque él ha fabricado guitarras, y conoce a músicos de todo el mundo”, añadía. Fue precisamente el maestro guitarrero quien se encargó de presentar el ciclo de conciertos, que se inició ayer, y al propio Dieci.

 

Como concertista, el italiano ha dado la vuelta al mundo con esa guitarra, además de haber grabado con ella diez discos. “Tocamos la guitarra con los dedos.  Por eso, cuando lo hacemos, tenemos que estar seguros de que es la apropiada para nuestras condiciones. En mi opinión, la guitarra tiene que tener muchos colores en la dinámica y en los tonos, ser apropiada para diferentes tipos de música, y eso es algo que encuentro en este instrumento. Hay guitarras adecuadas para un tipo de música, pero no tanto para otro. En ocasiones tienen buen tono, pero no proyectan, y al contrario, proyectan bien, pero sin el tono adecuado”, explicaba el músico. En palabras de Dieci, en la 'Romanillos', “todo está en la proporción correcta”.

 

También la sala de conciertos es importante, “es un instrumento más, y a veces el principal”. Igualmente, su Romanillos, “suena bien en el promedio de las salas, no necesita una acústica especial para dar lo mejor”, decía ayer. Su concierto mágico tuvo lugar en “una ciudad medieval encantadora”, describió. Además de las obras de los compositores españoles, Dieci interpretó otras de Johann Sebastian Bach y Heitor Villa-Lobos.La Ermita de San Roque se llenó para escuchar un concierto al que asistió la concejala de Cultura, Sonsoles Arcones.