Argentina dice que la expropiación de Aerolíneas es inexorable
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
Prosigue el culebrón sobre Aerolíneas Argentinas. La expropiación por el estado argentino de la compañía aérea al grupo español Marsans fue calificada ayer de inexorable y absolutamente necesaria por el presidente del bloque de Concertación, aliado del Gobierno en la Cámara de los Diputados, Hugo Prieto.
Este es un nuevo paso más hacia la expropiación de las compañías, después de que el Gobierno presentase un proyecto de ley que declara ambas empresas de utilidad pública y sujetas a expropiación. Este documento, que será discutido durante la semana, considera válida la valoración negativa de unos 600 millones de euros, y propone la expropiación por el valor simbólico de un peso. Mientras, desde España, el presidente de la patronal CEOE sigue confiando en que el gobierno de Cristina Fernández cumpla con los acuerdos para llegar a un acuerdo entre las partes.
Hugo Prieto fue uno de los firmantes del proyecto de ley, y auguró que el tratamiento del mismo en el Congreso va a ser muy rápido, lo que coincide por lo adelantado por el diputado socialista Ariel Basteiro, que dijo el lunes que la ley podría estar aprobada el 20 de diciembre.
AVANZA EL PROCESO
Estas declaraciones demuestran el avance del proceso de expropiación, que parece irremediable. El lunes, el Gobierno presentó un proyecto de ley que declara ambas compañías como de utilidad pública y sujetas a expropiación, según informaciones de Clarín recogidas por otr/press. La ley, que se discutirá durante la semana en la Cámara de Diputados argentina, incluye la tasación negativa del Tribunal. Con esta iniciativa, el Gobierno pretende garantizar la continuidad y seguridad del servicio público del transporte aerocomercial de pasajeros, correo y carga, así como el mantenimiento de los empleos.
Esto se une a la decisión tomada el pasado viernes, cuando a petición del Gobierno, un juez decretó la intervención de la compañía, designando un observador. Además, confirmaron en su cargo al actual director general, Julio Alak, designado tras el acta de acuerdo firmada por Marsans y el Gobierno el pasado 17 de julio.
Y mientras, desde Madrid, el presidente de la patronal CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, expresó su deseo de que el Gobierno de Cristina Kirchner cumpla con los contratos que tiene firmados con Aerolíneas Argentinas. Tras inaugurar unas jornadas de economía, Díaz Ferrán, que es copropietario de Marsans, rechazó hacer más referencias al conflicto con las autoridades argentinas, y sólo apeló al cumplimiento de los contratos.
Hugo Prieto fue uno de los firmantes del proyecto de ley, y auguró que el tratamiento del mismo en el Congreso va a ser muy rápido, lo que coincide por lo adelantado por el diputado socialista Ariel Basteiro, que dijo el lunes que la ley podría estar aprobada el 20 de diciembre.
AVANZA EL PROCESO
Estas declaraciones demuestran el avance del proceso de expropiación, que parece irremediable. El lunes, el Gobierno presentó un proyecto de ley que declara ambas compañías como de utilidad pública y sujetas a expropiación, según informaciones de Clarín recogidas por otr/press. La ley, que se discutirá durante la semana en la Cámara de Diputados argentina, incluye la tasación negativa del Tribunal. Con esta iniciativa, el Gobierno pretende garantizar la continuidad y seguridad del servicio público del transporte aerocomercial de pasajeros, correo y carga, así como el mantenimiento de los empleos.
Esto se une a la decisión tomada el pasado viernes, cuando a petición del Gobierno, un juez decretó la intervención de la compañía, designando un observador. Además, confirmaron en su cargo al actual director general, Julio Alak, designado tras el acta de acuerdo firmada por Marsans y el Gobierno el pasado 17 de julio.
Y mientras, desde Madrid, el presidente de la patronal CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, expresó su deseo de que el Gobierno de Cristina Kirchner cumpla con los contratos que tiene firmados con Aerolíneas Argentinas. Tras inaugurar unas jornadas de economía, Díaz Ferrán, que es copropietario de Marsans, rechazó hacer más referencias al conflicto con las autoridades argentinas, y sólo apeló al cumplimiento de los contratos.