Ascensión Moranchel: “Hay a quienes no se les puede dar un animal”

08/01/2011 - 23:39 Redacción

La Asociación Protectora de Animales La Camada está contenta, ilusionada y agradecida porque el Ayuntamiento de Guadalajara haya vuelto a poner su confianza en ellos para llevar a cabo un trabajo tan bonito, complicado, laborioso y gratificante como el de hacerse cargo del Centro de Recuperación de Animales Abandonados, el albergue municipal. Como explica la voz y la fuerza de esta asociación, Ascensión Moranchel –también su presidenta–, “son muchos animales y, precisamente, si concursamos fue porque creíamos que moralmente se lo debíamos, puesto que todos ellos dependen de nosotros, algunos llevan viviendo con nosotros desde que empezó el centro hace ocho años”. En este sentido, Moranchel considera totalmente necesario que el centro sea gestionado por una entidad sin ánimo de lucro –y no por una empresa que busque rentabilidad–, con amplia experiencia y con mucha fuerza de voluntariado. “Solamente con mucha ilusión, mucha esperanza, mucho voluntariado, se puede sacar tanto animal adelante”, añade. 
Otra clase de ilusiones y metas son las que lograrán mejorar las instalaciones del centro
En la nueva etapa del albergue, Moranchel tiene objetivos, metas, retos e ilusiones muy claros. Lo principal es reducir el número de animales abandonados, que sigue en alza en España y también en Guadalajara, como reconoce y lamenta la presidenta de La Camada. Ése es el reto más complicado de conseguir, como es consciente, pero no cejarán en su empeño, para lo que seguirán llevando a cabo sus numerosas campañas de educación y concienciación ciudadana, entre otras muchas iniciativas. “Nuestra ilusión es que, en estos momentos en que el abandono de animales va al alza en España, podamos iros contando, poco a poco, que va disminuyendo”.
    Ilusiones más sencillas y accesibles de conseguir son las que se marcan con su Club Canicross, el cual “está dando muy buenos resultados”, declara orgullosa Moranchel. “Estamos teniendo con nuestros animales un éxito tremendo porque están trayendo para Guadalajara bastantes trofeos, y ellos son felices corriendo”. Por otro lado, otro motivo de satisfacción para La Camada es el nuevo proyecto que están desarrollando con entidades francesas, las cuales acogen animales mayores de ocho años que en España “ya no tienen ninguna salida”. “Aparte de los galgos y podencos que llevábamos, ahora también vamos a empezar a llevar mestizos, poco a poco, pero nos tiene muy ilusionados”, reconoce la presidenta, volcada en este proyecto denominado Senior.
    Otra clase de ilusiones y metas son las que lograrán mejorar las instalaciones del centro, tanto del albergue situado en la avenida de Pedro Sanz Vázquez como la situada en el Serranillo. Ambas infraestructuras serán objeto de algunas reformas que perseguirán dar mayor calidez y protección a los animales, tanto a los perros como a los gatos. “Queremos cambiar el vallado de los cheniles, que ya está muy deteriorado, porque ya son muchos años los que lleva, y ponerlo incluso de otro material más resistente para que ellos no lo puedan morder; también tenemos proyectada la compra de varias casetas, para que dentro de los cheniles tengan su caseta y no tengan frío, aunque tenemos muy buenas mantas que nos donan; y en la gatera hemos estado poniendo doble techo. Hay muchas cosas, no tengo el listado en la cabeza, pero poco a poco”, detalla Moranchel.
Para llevar a cabo todos estos proyectos e ilusiones, Moranchel reclama mayor implicación ciudadana, pues nunca sobran los voluntarios. “Hay muchas formas de colaborar”, señala, pues se puede adoptar, apadrinar, simplemente acudir para pasar un rato con los animales, limpiarles, darles de comer o sacarlos a pasear. También es posible hacerse socios de La Camada y aportar una pequeña cantidad a su causa, que no es otra que dar una segunda oportunidad a animales que un día tuvieron un amo que los abandonó, “algo que nunca harían ellos”, asegura Moranchel, quien considera que “las mascotas son los seres vivos más cariñosos y más agradecidos que hay. Algunos hasta han muerto de depresión porque ellos sí quieren a sus amos, a diferencia de muchas personas”.