Azuqueca inicia la atención pionera a los niños víctimas de la violencia de género

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

La Asociación ‘Mujeres por las Mujeres. Juntas podemos’ de Azuqueca de Henares ha puesto en marcha un proyecto piloto y pionero, Atención Psicológica a menores víctimas de la violencia de género, con el fin de ayudar a los niños de entre cuatro y 18 años de toda la provincia a superar esta situación. La coordinadora provincial del Instituto de la Mujer, Pilar de Andrés, explicó ayer, durante la presentación de esta iniciativa, que el 55% de los chavales que viven en familias que sufren esta lacra social son testigos de las agresiones y de ellos el 66% son también víctimas.
Nueve meses después de su nacimiento, la asociación de Azuqueca de Henares Mujeres por las mujeres. Juntas podemos ha logrado poner en marcha un proyecto pionero a nivel provincial para atender psicológicamente a los menores, entre cuatro y 18 años, víctimas de la violencia de género. Se trata de una iniciativa piloto, aprobado por la Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha y financiado a través de la Obra Social de Caja de Guadalajara, que tendrá una duración inicial de tres años.
Un psicólogo está trabajando desde principios de mes en este proyecto que atiende en la actualidad a tres menores y otros 26 están en fase de diagnosis. Pablo Nieva es en la actualidad el profesional responsable de este servicio que tratará de forma prioritaria a los niños de las dos Casas de Acogida de la provincia (Guadalajara y Azuqueca) y a los que deriven los distintos Centros de la Mujer existentes.
La coordinadora provincial del Instituto de la Mujer, Pilar de Andrés, explicó ayer durante la presentación pública de esta iniciativa en el Foro que el 55 por ciento de las niños que viven en el seno de familias donde existe violencia de género son testigos de agresiones, y de ellos, el 66% son además víctimas. “El objetivo es mejorar el sentimiento de seguridad entre estos niños, enseñarles a resolver conflictos de manera dialogada y que sepan que otro modo de ser es posible”, detalló De Andrés. La responsable provincial insistió ayer en que “aprendemos lo que vemos, no lo que nos dicen; reproducimos lo que hemos visto y los niños de este programa han visto comportamientos en sus familias que no son buenos”.
La presidenta de la asociación Mujeres por las Mujeres. Juntas podemos, Yolanda Fuentes, hizo hincapié ayer durante la presentación en la necesidad de transmitir a estos niños valores de respeto, igualdad y tolerancia para que con esta asistencia dejen atrás, junto a sus madres, estos episodios violentos. Según Fuentes, cuanto más jóvenes sean los niños y antes se corrijan estos comportamientos será mejor. La actuación en cada caso la determinará el psicólogo que se desplazará, a petición de los centros de la mujer, a los municipios que lo demanden. La presidenta de Mujeres por las mujeres señaló que este proyecto responde a uno de los objetivos fundacionales de la asociación. “Visualiza los derechos de los hijos más allá de los que tienen las madres porque muchas veces no se les considera víctimas directas y sí lo son”, aseveró.
Fuentes aseguró ayer que, aunque el proyecto tiene una duración inicial de tres años, se valorará la necesidad de prorrogarlo o poner en marcha nuevos programas con la confianza de que nuevos organismos también se quieren implicar en ellos. “Seguiremos luchando por lo que creemos y por estos proyectos tan bonitos e importantes”, dijo.
Al acto de presentación, que tuvo lugar ayer, asistieron además la concejala de Igualdad en el Ayuntamiento azudense, María José Naranjo; Álvaro Barbas, responsable de la Obra Social de Caja de Guadalajara; el psicólogo encargado del proyecto, Pablo Nieva; y la presidenta de la asociación. Naranjo destacó el hecho de que sea “un programa piloto”, y mostró, una vez más, el apoyo del Ayuntamiento de Azuqueca a esta nueva asociación de mujeres, que ha surgido por iniciativa de las usuarias de la Casa de Acogida de Azuqueca, y a sus proyectos, con los que pretenden centrar su atención en la ayuda a los niños que viven o han vivido en un entorno familiar con episodios de violencia de género.
El programa se financia con la aportación económica de Caja de Guadalajara, a través de su Obra Social, 117.000 euros, que se incrementarán hasta los 140.000, según los datos facilitados por el Jefe de Obras Sociales de la entidad, Álvaro Barbas.