Barreda anuncia que el lunes se firmará el pacto por la Vivienda
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, anunció ayer que el próximo lunes, 12 de mayo, el Gobierno regional firmará un gran pacto por la vivienda con la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, en el que también participarán todas las organizaciones sindicales y empresariales de la región.
Por su parte, la portavoz de Grupo Parlamentario popular en las Cortes lamentó que el PSOE les haya "excluido" a la hora de rubricar el "gran pacto" por la vivienda.
"Quiero que el Ministerio vuelque parte de sus ayudas para colaborar en la institución de una nueva figura que hemos creado, que son las viviendas público-privadas", recordó el presidente regional, que son más amplias que las Viviendas de Protección Oficial (VPO), "y que están pensadas para parejas mileuristas que pagarían en torno a los 120.000 euros", dijo. De este modo, "también se están ofreciendo ventajas a los constructores en un momento de problemas para vender las viviendas construidas", explicó. Por tanto, el presidente regional aseguró que la Junta ofrece una garantía doble, porque "ayudamos a los promotores a la financiación de los materiales de estas viviendas, por ejemplo, y a los compradores a que se hagan con ellas". En este sentido, Barreda manifestó que todos los promotores "están interesados", porque de este modo "ganarán menos dinero que con las viviendas libres, sí, pero ganarán algo, por lo menos". "Estamos construyendo para que el sector y las industrias afines no se hundan", destacó. En una entrevista concedida a los Desayunos informativos de TVE y recogida por Europa Press, Barreda afirmó por otra parte, que en Castilla-La Mancha "quedan muchos pisos por vender", y la crisis que se avecina le preocupa "mucho", porque "en Castilla-La Mancha tenemos la peculiaridad de que la crisis inmobiliaria no sólo afecta al sector de la construcción, sino también a las empresas auxiliares". En este sentido, explicó que el 70 por ciento de las puertas que se venden en España se fabrican en Castilla-La Mancha, y que el 60 por ciento de los ladrillos y de la cerámica también, "por eso nos afecta doblemente la crisis inmobiliaria". De este modo, subrayó que otra peculiaridad que existe es que los ciudadanos madrileños cada vez más se desplazan fuera de Madrid en busca de viviendas más baratas y amplias "y la mayoría se vienen a Castilla-La Mancha".Al mismo tiempo, "en el conjunto de los 80.000 kilómetros cuadrados hay un total de 47.000 demandantes de viviendas protegidas, para los que vamos a firmar este gran pacto".
Denuncia del PP
La portavoz del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos, acusó ayer al presidente regional, José María Barreda, y a los dirigentes socialistas de la región de gobernar de espaldas a las instituciones democráticas y de manifestar "desprecio" hacia las mismas, al tiempo que lamentó que no se haya contado con los 'populares' para rubricar el pacto por la vivienda el próximo lunes.
En rueda de prensa, Guarinos mostró su preocupación por la forma de gobernar del PSOE en Castilla-La Mancha en dos temas fundamentales: el agua y la vivienda.
Prosiguió pidiendo a Barreda que defienda el cese de esta "hipoteca", y que no niegue lo recogido en la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha antes de que se haya iniciado la tramitación del mismo en las Cortes Generales. Se preguntó con qué legitimidad actúa así el Gobierno socialista y le recordó que las decisiones en torno al Estatuto no se pueden tomar de forma unitaria.
En este sentido, sostuvo que si se quieren plantear cuestiones en relación al Estatuto de Autonomía, el grupo de trabajo constituido para su reforma tendría que ser el que decida si es o no posible. A su juicio, un gobierno tiene que gobernar respetando a las instituciones democráticas, la sociedad y el Parlamento regional.
Respecto al tema de la vivienda, la portavoz del Grupo Popular aludió al Pacto por la Vivienda anunciado el pasado 17 de abril por el presidente de Castilla-La Mancha en las Cortes regionales, y consideró que un acuerdo de estas características tendría que negociarse con los ciudadanos y no de espaldas a las instituciones.
Ante el anuncio de Barreda de que ese "gran pacto" se firmará el próximo lunes con la ministra del ramo, Beatriz Corredor, en el que también participarán todas las organizaciones sindicales y empresariales de la región, Guarinos destacó que "parece que el PP queda excluido de este pacto" y lamentó que Barreda desprecie ahora al Parlamento a la hora de rubricar esta iniciativa.
"NO HACER DEMAGOGIA".
Reprochó al Ejecutivo que a fecha de hoy los ciudadanos no conozcan nada más sobre lo que el Gobierno ha denominado viviendas de iniciativa público-privada y exclamó que con este tema "no se puede hacer demagogia". Recordó que el PP ha pedido la comparecencia del consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, y ésta todavía no se ha producido.
"¿Qué intereses puede haber detrás de este pacto, que el Gobierno no quiere con luz y taquígrafos informar"?, se preguntó Guarinos, quien exigió al Gobierno socialista que lleve el Pacto por la Vivienda a las Cortes. Así, Guarinos mostró la voluntad del PP de dialogar, pero no de acatar lo que imponga el Gobierno. "No queremos que se nos imponga nada, sino queremos negociar", apuntó.
"Quiero que el Ministerio vuelque parte de sus ayudas para colaborar en la institución de una nueva figura que hemos creado, que son las viviendas público-privadas", recordó el presidente regional, que son más amplias que las Viviendas de Protección Oficial (VPO), "y que están pensadas para parejas mileuristas que pagarían en torno a los 120.000 euros", dijo. De este modo, "también se están ofreciendo ventajas a los constructores en un momento de problemas para vender las viviendas construidas", explicó. Por tanto, el presidente regional aseguró que la Junta ofrece una garantía doble, porque "ayudamos a los promotores a la financiación de los materiales de estas viviendas, por ejemplo, y a los compradores a que se hagan con ellas". En este sentido, Barreda manifestó que todos los promotores "están interesados", porque de este modo "ganarán menos dinero que con las viviendas libres, sí, pero ganarán algo, por lo menos". "Estamos construyendo para que el sector y las industrias afines no se hundan", destacó. En una entrevista concedida a los Desayunos informativos de TVE y recogida por Europa Press, Barreda afirmó por otra parte, que en Castilla-La Mancha "quedan muchos pisos por vender", y la crisis que se avecina le preocupa "mucho", porque "en Castilla-La Mancha tenemos la peculiaridad de que la crisis inmobiliaria no sólo afecta al sector de la construcción, sino también a las empresas auxiliares". En este sentido, explicó que el 70 por ciento de las puertas que se venden en España se fabrican en Castilla-La Mancha, y que el 60 por ciento de los ladrillos y de la cerámica también, "por eso nos afecta doblemente la crisis inmobiliaria". De este modo, subrayó que otra peculiaridad que existe es que los ciudadanos madrileños cada vez más se desplazan fuera de Madrid en busca de viviendas más baratas y amplias "y la mayoría se vienen a Castilla-La Mancha".Al mismo tiempo, "en el conjunto de los 80.000 kilómetros cuadrados hay un total de 47.000 demandantes de viviendas protegidas, para los que vamos a firmar este gran pacto".
Denuncia del PP
La portavoz del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos, acusó ayer al presidente regional, José María Barreda, y a los dirigentes socialistas de la región de gobernar de espaldas a las instituciones democráticas y de manifestar "desprecio" hacia las mismas, al tiempo que lamentó que no se haya contado con los 'populares' para rubricar el pacto por la vivienda el próximo lunes.
En rueda de prensa, Guarinos mostró su preocupación por la forma de gobernar del PSOE en Castilla-La Mancha en dos temas fundamentales: el agua y la vivienda.
Prosiguió pidiendo a Barreda que defienda el cese de esta "hipoteca", y que no niegue lo recogido en la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha antes de que se haya iniciado la tramitación del mismo en las Cortes Generales. Se preguntó con qué legitimidad actúa así el Gobierno socialista y le recordó que las decisiones en torno al Estatuto no se pueden tomar de forma unitaria.
En este sentido, sostuvo que si se quieren plantear cuestiones en relación al Estatuto de Autonomía, el grupo de trabajo constituido para su reforma tendría que ser el que decida si es o no posible. A su juicio, un gobierno tiene que gobernar respetando a las instituciones democráticas, la sociedad y el Parlamento regional.
Respecto al tema de la vivienda, la portavoz del Grupo Popular aludió al Pacto por la Vivienda anunciado el pasado 17 de abril por el presidente de Castilla-La Mancha en las Cortes regionales, y consideró que un acuerdo de estas características tendría que negociarse con los ciudadanos y no de espaldas a las instituciones.
Ante el anuncio de Barreda de que ese "gran pacto" se firmará el próximo lunes con la ministra del ramo, Beatriz Corredor, en el que también participarán todas las organizaciones sindicales y empresariales de la región, Guarinos destacó que "parece que el PP queda excluido de este pacto" y lamentó que Barreda desprecie ahora al Parlamento a la hora de rubricar esta iniciativa.
"NO HACER DEMAGOGIA".
Reprochó al Ejecutivo que a fecha de hoy los ciudadanos no conozcan nada más sobre lo que el Gobierno ha denominado viviendas de iniciativa público-privada y exclamó que con este tema "no se puede hacer demagogia". Recordó que el PP ha pedido la comparecencia del consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, y ésta todavía no se ha producido.
"¿Qué intereses puede haber detrás de este pacto, que el Gobierno no quiere con luz y taquígrafos informar"?, se preguntó Guarinos, quien exigió al Gobierno socialista que lleve el Pacto por la Vivienda a las Cortes. Así, Guarinos mostró la voluntad del PP de dialogar, pero no de acatar lo que imponga el Gobierno. "No queremos que se nos imponga nada, sino queremos negociar", apuntó.