Ben Barnes: “ ‘Narnia’ no es una película sangrienta, sólo un cuento para niños”

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: MATEO BALÍN. COLPISA
ESTRENO
Uno de los intérpretes destacados de Las Crónicas de Narnia, el inglés Ben Barnes, que da vida al Príncipe Caspian, apuntó que además de la acción esta entrega es “más oscura, abunda el humor y las relaciones entre los personajes son más adultas”, lo que no quiere decir que Las Crónicas de Narnia sigan teniendo en el público infantil su principal bastión.
El actor inglés, de 26 años, no cree que tanta acción desvirtúe el texto original, ya que más bien ayuda al desarrollo argumental de la cinta (de dos horas y media de duración), y señaló que más “irresponsable hubiera sido hacer una película más sangrienta cuando en el fondo ‘Narnia’ es sólo un cuento para niños”.

Mensaje
Para William Moseley (Peter Pevensei en la película) el desafío de esta cinta fue “mucho más grande”, ya que el director Andrew Adamson estuvo más pendiente de los pequeños detalles, “lo que nos hizo redoblar los esfuerzos”.
Tanto Moseley como Anna Popplewell (Susan Pevensie), que confirmaron su adiós a la próxima película -se estrenará en 2010-, abundaron en que el mensaje de ‘Narnia’, más allá de la acción entre los telmarinos y los narnianos, es que es posible superar los obstáculos de la vida real y sobreponerse gracias a la esperanza humana.
Aunque en un papel secundario, la española Alicia Borrachero aparece en la trama como la reina Prunaprismia, mujer del general Miraz, una aparición escueta que la actriz estuvo a punto de desechar. Consciente de que forma parte de una orquesta donde lo que importa es la sinfonía, Borrachero contó que se lleva como experiencia de una superproducción anglosajona los medios a la hora de caracterizar a los personajes, “el 50% del papel”, asegura.
Asimismo, señaló que para interpretar una película fantástica hay que “disparar la imaginación hasta el punto de creerte que la ardilla que está delante de ti te está hablando”. Y reconoció que entró en el reparto gracias a una prueba a la que iba sin expectativa alguna.