Brihuega celebró el Día del Turista con la vista puesta en la batalla de Villaviciosa

Brihuega saldó el sábado con éxito la celebración de su Día del Turista y la Feria Barroca, que este año ocupaba el puesto de la tradicional Feria Medieval. Tal y como indica el presidente de la Asociación III Centenario, Raúl de Lucas, el municipio registró un nivel de visitas elevado pese a las bajas temperaturas con las que llegó la mañana.
"La verdad es que vino mucha gente, a pesar del frío". Además, la situación terminó de reconducirse por la tarde, cuando el sol invitó a salir a la calle. Aunque la jornada estaba repleta de actos, De Lucas destaca que lo más llamativo fue la presentación de los dos nuevos gigantes con los que contará el municipio. Aunque ya tenían dos, el paso de los años había dejado su huella en ellos. En concreto, las nuevas adquisiciones son dos figuras creadas en honor al III Centenario, ya que representan las figuras de los contendientes, Felipe V y el archiduque Carlos. Primero, la Banda de Música de Brihuega salió de la Oficina de Turismo de la localidad en torno a las 12.30 horas, desde donde se dirigió hasta El Coso. Allí le esperaba la presentación de los gigantes "y todo el pueblo, que había ido a verlo". Después, sobre las 13.00, tanto los vecinos como los cuatro gigantes que ya tiene Brihuega acompañaron a los músicos en su nuevo peregrinar. Durante todo el día también hubo jornada de puertas abiertas en los monumentos. El presidente de la Asociación III Centenario señaló que en la celebración de estas jornadas también han confluido distintos aspectos que han hecho del pasado Día del Turista una edición especial, como la propia celebración del enfrentamiento entre Felipe V y el archiduque. "El año que viene se celebrará sin la presencia del centenario, que le ha dado un matiz más dieciochesco a todo". Durante toda la jornada se fueron celebrando distintos actos para conmemorar el Día del Turista. No se olvidó la organización de cuidar a los más pequeños a través de un cuentacuentos. También se realizó una exhibición de forja en el taller de herrería que estuvo completada por una visita guiada a la exposición sobre torturas de la época. La mañana se cerró con un espectáculo de malabares y música y, ya por la tarde, un teatro infantil se encargó de reabrir el programa de actos. Las exhibiciones continuaron con un espectáculo de vuelo libre de aves y rapaces, además de una representación entre los soldados contendientes en la batalla que se conmemora. Por último, además de un juicio a un hereje, se realizó una visita guiada nocturna por los lugares donde discurrió el asalto a Brihuega en 1710.