Brihuega estrena su Interés Turístico Regional con otro encierro masivo

Si de algo puede presumir Brihuega de este año es de su declaración de interés turístico. Esto se logró hace poco más de 15 días por aprobación del Gobierno regional. La consejera de Cultura, Turismo y Artesanía, Soledad Herrero, fue la encargada de hacerle la feliz comunicación a Adela de la Torre, alcaldesa de Brihuega. Desde primeras horas de la tarde miles de personas ansiosas de vivir un espectáculo único poblaban las empinadas calles de Brihuega. Todos comentaban sucesos anteriores, la gran presentación de los toros de este 2009 y predecían la agradable jornada vespertina que iban a vivir en pocas horas por los parajes que rodean al municipio briocenses. Desde las cinco de la tarde el tradicional parapachumba a modo de pasacalles amenizó con notas musicales los instantes previos al encierro. Hubo aficionados de toda España, pero principalmente de Madrid, Comunidad Valenciana, Castilla y León y, por supuesto, alcarreños llegados desde los lugares más recónditos de la provincia de Guadalajara. No hay que olvidar el mérito que tiene que Brihuega consiga reunir tanta expectación en un 16 de agosto que cayó en domingo. Una fecha plagada de espectáculos taurinos por toda España y Guadalajara. Sin ir más lejos, a la misma hora también hubo encierro por el campo en la cercana pedanía capitalina de Iriépal. Un año más hubo espectáculo Un año más, y van unos cuantos, el ganadero Pedro Sopeña volvió a ser el encargado de proveer a Brihuega de la materia prima del espectáculo, los cuatro astados. Fueron un cuarteto de utreros de bella lámina que hicieron las delicias de los muchos observadores. Pero no sólo de ellos, porque con una puntualidad de agradecer para un espectáculo de estas características se soltaron los toros desde a las calles desde la plaza de toros de La Muralla. En ese momento se pudieron ver las primeras carreras bonitas. También las primeras volteretas y contusiones. Los animales se fueron estirando para cruzar la población en camino hacia la libertad del campo abierto. Allí las carreras dejaron paso a los recortes de los más atrevidos y bonitas estampas camperas con caballos, más aún este año, donde hubo pocos vehículos a motor. Uno de los pocos, además, fue destrozado por un astado. Pero el encierro de Brihuega también es especial por su larga duración. La idea principal es recoger los toros a las 03.00 horas en el campo para poder dirigirlos a los corrales de San Felipe en el casco urbano briocense. Allí los que se hayan conseguido reunir durante esta pasada noche se bajarán hasta la plaza de toros hoy a las 12.00 horas, en lo que supone casi un día entero de suelta de reses por el campo. Al cierre de esta edición tres toros se encontraban en el paraje de La Boquilla esperando para ser llevados a los corrales de San Felipe. Además otro de los astados que no llegó a salir del pueblo estaba siendo enmaromado para bajarlo a los corrales de San Felipe. Por Brihuega y toros es un binomio