Bustares recupera su memoria histórica con la edición de un libro

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

El secretario de IU, José Antonio López-Palacios, junto al libro.    (Foto:  LYDIA LÓPEZ)
La localidad de Bustares acogió en la tarde de ayer un emotivo y entrañable acto homenaje a los represaliados republicanos de la Guerra Civil en este enclave de la provincia. Miguel Torija Morales, Fernando Morales Vacas y Fernando Benito Garrido presentaban Bustares, bajo el terror de la barbarie fascista, un libro de 255 páginas que pretende mostrar a sus vecinos “una parte de la verdad” de uno de los episodios más oscuros vividos por España.
Es un humilde intento de recuperar la memoria histórica, esa misma que cuenta con multitud de aristas y de la que se hace necesario desgranarlas una a una para comprender la importancia de lo que realmente sucedió.
Arropados por amigos procedentes de toda la comarca y la presencia de algún que otro conmovido superviviente, los autores llevaron a cabo la presentación de este libro que si por algo se caracteriza es por su gran valor humano. Un rasgo que se deriva de la esencia de sus artífices, hijos, sobrinos y nietos de los propios represaliados, que durante algo más de año y medio han trabajado para que este documento salga hoy a la luz. Carente de rigor histórico o científico, el texto aglutina una serie de historias verídicas, recabadas de primera mano en el transcurso de conversaciones y testimonios de los verdaderos protagonistas. De casi todos ellos aparece al menos una fotografía, bien individualmente o con sus familiares, en un intento de permanecer en el recuerdo de los que aún siguen aquí, a la vez que como homenaje a unas personas que creyeron y defendieron sus ideales, muchos de ellos aún hoy con la memoria adormecida por el dolor que sienten.
“Libro hecho con el corazón y las entrañas”, según afirma el secretario de organización de Izquierda Unida, José Antonio López-Palacios, escritor del preámbulo del texto, en él también se da cuenta de las rencillas ancestrales de los pueblos, agudizadas aún más si cabe durante los episodios de la Guerra Civil, y que en muchos casos fueron aprovechados para cobrarse venganzas personales. Y es que sin ser un lugar estratégico de combate para el frente sublevado, Bustares no se libró de las tensiones emanadas por parte de algunas personas afines al bando franquista. Buena cuenta de ello eran aquellas personas estrechamente relacionadas con el sacerdocio o las denominadas beatas, mujeres del pueblo que utilizaron la coyuntura para llevar a cabo sus propias represalias mediante denuncias al bando franquista.
El ejemplar, editado por la Asociación Cultural Icaria de Bustares y patrocinado por Izquierda Unida de Guadalajara, puede adquirirse en cualquier librería de Guadalajara a un precio simbólico de diez euros.