Caja Rural obtuvo unos resultados brutos de 38,2 millones en 2007
01/10/2010 - 09:45

La entidad cuenta con 743 empleados operativos en su red de 186 oficinas
Caja Rural de Toledo ha obtenido al término del ejercicio 2007 unos resultados brutos de 38,2 millones de euros. La eficiencia operativa de la entidad fue del 54,22%, firmando un balance con sólidas tasas de crecimiento en todos sus epígrafes contables.
El Consejo Rector propondrá a la Asamblea General orientar la mayor parte de estos resultados a incrementar los Recursos Propios, un total 27,7 millones. El resto se destinara al pago de impuestos, fondo de educación y promoción y retribución del capital social.
El director general de la entidad, Rafael Martín Molero, recordó sus manifestaciones del pasado año en el que afirmó que Caja Rural de Toledo se está convirtiendo en una entidad "sumamente previsible" por la confirmación casi exacta de los objetivos marcados al principio de cada ejercicio, informó la Caja en nota de prensa.
Desde hace años, cada uno de los balances anuales cerrados por la Caja evolucionan de forma positivamente creciente, una situación de solvencia que, en palabras del director general, "propicia la necesaria y adecuada garantía para la total seguridad de nuestros socios y clientes". Para Martín Molero, el mantenimiento de unos sólidos niveles de crecimiento, rentabilidad y eficiencia, siempre serán objetivos principales para el "permanente perfeccionamiento de nuestro modelo de gestión".
Prueba de esta mutua confianza, los recursos de clientes en sus diferentes modalidades ascendían al pasado 31 de diciembre a 2.787 millones. Por su parte, la inversión crediticia sumaba a la misma fecha 2.029 millones de euros. Consecuencia de la línea conservadora y de prudencia fijada en la concesión de operaciones de activo, ésta ha crecido en 218 millones de euros, en consonancia con el requisito impuesto por el Consejo Rector de mantener una elevada liquidez de balance. A 31 de diciembre de 2007 los recursos propios de Caja Rural de Toledo, de acuerdo a la normativa de Banco de España, superaban los 196 millones de euros, a los que se adicionarán los 27,7 millones de euros procedentes de la propuesta de distribución de resultados del ejercicio 2007. Al término del pasado año la entidad mantenía posiciones líquidas por importe de 236,7 millones de euros disponibles para hacer frente a posibles inversiones, o como garantía ante posibles turbulencias de los mercados financieros.
Caja Rural de Toledo contaba al final del ejercicio 2007 con 743 empleados operativos en sus 186 oficinas abiertas al público en Toledo, Guadalajara, Madrid y Ávila, que serán ampliadas durante el primer semestre de 2008 con otras 6 aperturas.
Asimismo, la entidad sigue manteniendo en su área de actuación similares cuotas de mercado en la suscripción de seguros agrarios y tramitación de subvenciones de la PAC que ejercicios anteriores, con unos porcentajes de contratación superiores a los del resto de entidades que operan en este campo.
El director general de la entidad, Rafael Martín Molero, recordó sus manifestaciones del pasado año en el que afirmó que Caja Rural de Toledo se está convirtiendo en una entidad "sumamente previsible" por la confirmación casi exacta de los objetivos marcados al principio de cada ejercicio, informó la Caja en nota de prensa.
Desde hace años, cada uno de los balances anuales cerrados por la Caja evolucionan de forma positivamente creciente, una situación de solvencia que, en palabras del director general, "propicia la necesaria y adecuada garantía para la total seguridad de nuestros socios y clientes". Para Martín Molero, el mantenimiento de unos sólidos niveles de crecimiento, rentabilidad y eficiencia, siempre serán objetivos principales para el "permanente perfeccionamiento de nuestro modelo de gestión".
Prueba de esta mutua confianza, los recursos de clientes en sus diferentes modalidades ascendían al pasado 31 de diciembre a 2.787 millones. Por su parte, la inversión crediticia sumaba a la misma fecha 2.029 millones de euros. Consecuencia de la línea conservadora y de prudencia fijada en la concesión de operaciones de activo, ésta ha crecido en 218 millones de euros, en consonancia con el requisito impuesto por el Consejo Rector de mantener una elevada liquidez de balance. A 31 de diciembre de 2007 los recursos propios de Caja Rural de Toledo, de acuerdo a la normativa de Banco de España, superaban los 196 millones de euros, a los que se adicionarán los 27,7 millones de euros procedentes de la propuesta de distribución de resultados del ejercicio 2007. Al término del pasado año la entidad mantenía posiciones líquidas por importe de 236,7 millones de euros disponibles para hacer frente a posibles inversiones, o como garantía ante posibles turbulencias de los mercados financieros.
Caja Rural de Toledo contaba al final del ejercicio 2007 con 743 empleados operativos en sus 186 oficinas abiertas al público en Toledo, Guadalajara, Madrid y Ávila, que serán ampliadas durante el primer semestre de 2008 con otras 6 aperturas.
Asimismo, la entidad sigue manteniendo en su área de actuación similares cuotas de mercado en la suscripción de seguros agrarios y tramitación de subvenciones de la PAC que ejercicios anteriores, con unos porcentajes de contratación superiores a los del resto de entidades que operan en este campo.