Castilla-La Mancha, un 'coto' social que genera de 630 millones anuales y 1,7 millones de jornales

01/03/2019 - 15:29 Redaccion

 

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En los últimosaños se ha apostado por un modelo de caza moderna y sostenible que preserve el entorno y que impulse la vida en los pueblos, ayudando a fijar población .  

El sector de la caza se ha consolidado como determinante para la economía y el desarrollo rural de Castilla-La Mancha. La práctica cinegética es histórica en la tierra del Quijote y ha evolucionado para adaptarse a los nuevos tiempos, sin perder la sostenibilidad y el espíritu conservacionista del medio natural como hoja de ruta. Hoy, cuando se habla tanto de tomar medidas para frenar la despoblación que acusan nuestros pueblos, merece la pena echar una mirada a los números de una actividad que factura más de 630 millones de euros anuales y que genera en Castilla- La Mancha, 1,7 millones de jornales al año. Esto se traduce en  364 millones de movimiento económico, casi un 2 por ciento de PIB regional. Además, hay que sumar los 57 millones de euros se obtienen vía ingresos por tasas en sus diferentes conceptos, de los que según datos oficiales el 28% fueron impuestos abonados directamente por cazadores, rehaleros y gestores de terrenos cinegéticos.  Según datos oficiales, el gasto realizado por los diferentes actores genera unos retornos fiscales de 41,2 millones de euros para la Hacienda Pública en concepto de Impuesto de Sociedades, IRPF e IVA. Esto se traduce en que por cada euro de gasto en materia cinegética en la región se generan 1,05 euros de PIB.

 Castilla La Mancha atesora el 16% del terreno cinegético nacional, siendo la segunda comunidad autónoma con mayor extensión de terrenos cinegéticos por detrás de Castilla y León. Sólo en la región hay cerca de 5.900 cotos, que representan el 18% del total en España, que contribuyen a la conservación de la biodiversidad. Es destacable que uno de cada tres cotos en la región participa en proyectos de recuperación o en la conservación o desarrollo de la biodiversidad.

Por eso no es de extrañar que desde el Ejecutivo que preside Emiliano García-Page se hable de Castilla-La Mancha como una “industria absoluta” relacionada con la caza y la “potencia cinegética” de todo el país, “y lo hacemos conforme a la ley y con respeto”.  

En estos últimos años, se ha dado un paso hacia delante en la defensa decidida por el sector, apostando por la perspectiva social de la práctica cinegética con  la modificación que se han realizado en la Ley de Caza de Castilla- La Mancha, facilitando el acceso a la actividad a los que menos recursos tienen y sin perder de vista la conservación del medio natural. Se ha apostado por un modelo de caza moderna y sostenible que preserve el entorno y que impulse la vida en los pueblos, ayudando a fijar esa población que tanta falta les hace.  

La recuperación de la figura del coto social, que fue suprimida en la anterior legislatura y que impedía el acceso a la caza en igualdad de condiciones a los ciudadanos, constituye la respuesta a una demanda que venía desde las personas que viven en el medio rural y que son las verdaderas protagonistas del desarrollo rural.

El coto social “Las Dehesas”, en la provincia de Albacete, dentro del término municipal de Alpera, y el de Sevilleja de la Jara, en la provincia de Toledo han sido los primeros en crearse durante la temporada que acaba de terminar.

Y con el ánimo de favorecer la caza en nuestra región, se han suprimido del pago de las tasas de la licencia de caza a los ciudadanos jubilados. En el horizonte más cercano está  exonerar a la totalidad de los ciudadanos de la región de este gasto. Los que vengan de fuera deberán seguir abonándola. 
 
En este mismo sentido, los cotos de las sociedades de cazadores, donde se practica una caza vecinal, con especial atención a los cazadores locales, han podido reducir ya los importes de la matricula un 50 por ciento, mientras que las zonas colectivas de caza que se encuentran federadas tienen un beneficio fiscal adicional de un 15 por ciento y aquellas sociedades que cumplen los fines sociales definidos para las Zonas Colectivas de Caza tienen un descuento en el pago de la matrícula del 30 por ciento.

También se está prestando especial interés al control de la superpoblación de especies como el conejo, el ciervo y el jabalí habilitando permisos temporales de caza en los lugares donde proliferan y que están causando daños en cultivos o provocando accidentes en carreteras. El control de la especie también ayuda a evitar  la hibridación con otras especies domésticas e, incluso, exóticas como el cerdo vietnamita, en el caso del jabalí y la propagación y contagio de enfermedades. 

Por otro lado, también desde el Gobierno de Castilla-La Mancha se está recuperando la perdiz roja autóctona a través de la puesta en marcha de un plan que ya está dando sus frutos y que se centra en dos líneas principales de trabajo: la recuperación genética de la especie y la reintroducción de la misma a través de la venta de pollos y huevos a las granjas comerciales.

De cara a los próximos meses, la televisión autonómica –CMMedia– pondrá a disposición de los televidentes un canal temático de caza y pesca, otra apuesta más por el Gobierno de Castilla-La Mancha, en su defensa por un sector clave en el desarrollo económico y social de nuestros pueblos.