Cerca de 400 personas rechazaron el preacuerdo UE-Turquía en Guadalajara
La libertad, igualdad, protección y solidaridad con los refugiados sirios, iraquíes y de otras procedencias es la máxima que este miércoles defendieron alrededor de 400 personas concentradas a las puertas de la Subdelegación del Gobierno de Guadalajara.
La convocatoria, impulsada por los sindicatos CCOO y UGT, está respaldada por todos los partidos políticos de ámbito nacional salvo el PP (PSOE, Podemos, IU, Ciudadanos y Equo); además de por USO, por las organizaciones católicas Caritas y HOAC; por la Federación de Derechos Humanos de España, el Consejo General de la Abogacía, la Coordinadora de ONG para el Desarrollo, Médicos del Mundo, MPDL-Movimiento por la Paz, EAPN, ACCEM, CEAR y Unicef-España.
El manifiesto de esta concentración lo leyó el periodista Juan Solo. En el se critica el preacuerdo adoptado el 7 de marzo por el Consejo de Europa con Turquía al entender que evidencia la absoluta insensibilidad de la Unión Europea y los estados miembros ante la crisis humanitaria de las personas refugiadas y refugiados que arriesgan su vida huyendo de la guerra.
La Unión Europea, además de incumplir la legalidad internacional, elude su responsabilidad de dar respuesta a las miles de personas refugiadas que se agolpan en su territorio y en sus fronteras, agregó. Y es que el preacuerdo con Turquía da vía libre a las devoluciones sumarias en caliente, un acuerdo que se suma a múltiples decisiones que han ido minando los valores fundamentales de la Unión Europea y han incumplido sistemáticamente la legislación vigente, indicaron los firmantes de dicho manifiesto.
Todos ellos coinciden en que esta medida no resuelve ningún problema, sino que al contrario, provocará la apertura de otras vías más peligrosas y costosas para las personas refugiadas devueltas que pretendan llegar a países de la Unión Europea o bien el confinamiento de otras muchas en campamentos inhumanos sin ninguna perspectiva de futuro.
Los firmantes recordaron que los refugiados son seres humanos que huyen de la guerra. Hacer de ellos una mercancía para intercambio económico es inhumano y no dará lugar a una respuesta más humanitaria.
No debería haber ningún intercambio de refugiados, criticó el manifiesto, que también incidió en que los estados miembros deberían invertir tiempo y recursos para restablecer la paz en Oriente Medio así como trabajar en vías seguras para que los refugiados no tengan que arriesgar su vida para obtener protección.
Las organizaciones firmantes manifiestan su más absoluto rechazo a la gestión humanitaria de los refugiados. Europa tiene capacidad, pero no tiene voluntad.
Al Gobierno le invitaron a reconsiderar la ratificación del pacto alcanzado hasta el momento y se abran vías seguras para los refugiados, que tienen dicha protección garantizada por ley.
Por estos motivos, el manifiesto concluyó solicitando medidas urgentes que atajen las causas y consecuenicas de la mayor crisis humanitaria.