Chaves incide en la necesidad de lograr un acuerdo ante los intereses entre regiones

“Pero lamentablemente --continuó Barreda--- en la toma de consideración del texto en el Congreso se evidenciaron diferencias que luego quedaron de manifiesto en las enmiendas que los dos grupos presentaron en la Comisión Constitucional”.

El espíritu de lo acordado
Según Barreda, mientras el PSOE mantiene “el espíritu de lo que fue acordado de manera unánime en el Parlamento regional, el PP que ha cambiado de posición”. “Esa falta de unanimidad ha quebrado la reforma, que lleva empantanada meses en el Congreso de los Diputados”, y por ello defendió que “Castilla-La Mancha debe tomar de nuevo la iniciativa para organizar un nuevo consenso para desbloquear la situación”. “Las noticias que me llegan de las declaraciones que hace la presidenta del PP es pedir tranquilidad en la medida que considera que hay cabos sin atar, y como quiero fervientemente un acuerdo prefiero esperar a que esto suceda”, dijo.
Eso sí, apostilló el presidente regional, en ese acuerdo deben prevalecer los intereses de los castellano-manchegos sobre los partidistas, y sobre todo, debe contemplar una reserva hidráulica que garantice las necesidades de la región y su desarrollo.
Manuel Chaves, expresó ayer la intención del Gobierno central de convocar antes del verano el Consejo de Política Fiscal y Financiera para cerrar un propuesta consensuada que dé lugar a un sistema de financiación autonómica “multilateral y no bilateral, que sirva a los intereses de todos los ciudadanos españoles”, al tiempo que expresó su deseo de cerrarlo pronto para “poder hablar ya de cantidades”. Chaves realizó estas declaraciones, en rueda de prensa, al término del encuentro que mantuvo en Toledo con el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, dentro de la ronda de reuniones que está manteniendo con los titulares de los ejecutivos autonómicos de España.
El vicepresidente tercero, que comenzó asegurando que el encuentro con Barreda fue “amable, fructífero, y positivo”, aseveró que el fin último de este sistema, además de garantizar la autonomía de las 17 comunidades y las ciudades autónomas, es garantizar la igualdad de condiciones de los españoles a la hora de acceder a los servicios, sanitarios, educativos, o las prestaciones sociales. “La propuesta inicial trata de garantizar este objetivo, y tiene como punto de referencia a la población, complementada con otras variables, para que las comunidades tengan más autonomía financiera y corresponsabilidad fiscal”, dijo.En este punto, el ministro de Política Territorial recordó que la propuesta inicial es que el Estado ceda a las comunidades la gestión del 50 por ciento de los impuestos, que servirá de base para su financiación.

Buenas relaciones
“Ójala encontremos entre todas las comunidades un acuerdo para cerrar ese sistema de financiación y poder hablar ya de cantidades”, expresó Chaves, que añadió que para ello es imprescindible que la relaciones entre Estado y Comunidades autónomas estén “bien engrasadas y funcionen bien”.Por su parte Barreda, que coincidió con su interlocutor en que la reunión fue “larga, tranquila y fructífera”, señaló que en ella repasaron las cosas que interesan a Castilla-La Mancha y a España, como es la financiación autonómica y la situación de la región en ese contexto.
“Todas las variables para determinar el modelo de financiación a Castilla-La Mancha le vienen muy bien, empezando por el incremento de la población, que resulta muy ventajoso, así como la superficie, o la dispersión de la población, por lo que quedamos en una posición razonablemente nueva”, manifestó Barreda. “Pero lo que no es nuevo”, prosiguió el titular del Ejecutivo regional, es el compromiso que el Gobierno central tiene para que este sistema garantice la igualada entre todos los españoles, independientemente de la procedencia geográfica.