Cogolludo y Arbancón afrontan la noche con incertidumbre

17/07/2014 - 16:22 Redacción

En torno a las 14.00 horas se ha declarado un incendio en el término municipal de Cogolludo, el mismo día que en el que se cumplía el noveno aniversario de la muerte de nueve retenes con base en la localidad y dos agentes medioambientales en el incendio de Riba de Saelices.
La noche ha caído y la alerta continua en la zona del incendio. Las últimas cifras ofrecidas por el delegado de la Junta, José Luis Condado, arrojaban 300 hectáreas arrasadas por el fuego y un perímetro de 500. Sin embargo, las declaraciones llegaban antes de que las llamas hicieran un último requiebro y obligaran, merced a la actuación del viento, a evacuar apresuradamente el puesto de mando avanzado que se había instalado en Arbancón junto a la zona del pinar. “El viento no ha parado en todo el día, ha cambiado y hemos tenido que venirnos a la zona de la ermita de la Salceda”, apuntaba el alcalde la localidad, Gonzalo Bravo. A las 21.30 horas ya no se veían columnas de humo, pero el miedo sigue allí. “Si se aviva este frente, puede llegar al parque natural a Jucar, Muriel y ya no lo para nadie”. El alcalde de Tamajón, Eugenio Esteban, de donde es pedanía Muriel, también se mostraba cauto. “Yo creo que aquí no va a llegar, pero he recomendado a la gente precaución porque estas cosas son imprevisibles”.
El otro de los frentes era el de Aleas, de donde el fuego pasó a la pedanía de Romerosa. Desde la Asociación Profesional de Agentes Medioambientales (APAM CLM) confirmaron el desalojo de vecinos en ambas pedanías de Cogolludo. En la de Aleas, concretamente, en la urbanización Las Torres, señaló el alcalde de Cogoluudo, Jaime de Frías.
Condado contabilizó 17 medio aéreos y otros tantos terrestres, lo que supuso más de 150 personas en el momento de mayor actividad. Desde el Ministerio de Agricultura enviaron cuatro aviones anifibio de gran capacidad, un helicóptero bombardero y un avión de comunicaciones a los que se sumaron los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) cuando se decretó el Nivel 2. Con posterioridad se elevaron a unos 200 los efectivos desplazados hasta el lugar de los hechos. Los medios áereos se retiraban al anochecer.