Comienzan las obras de la interconexión de los polígonos de la capital y Cabanillas

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

La obra comenzará en la intersección con la CM-1002.                  (Foto: PEPE ZAMORA)
Por: Redacción
La Junta de Comunidades ha comenzado esta semana las obras de la vía de interconexión de los polígonos industriales de Guadalajara y Cabanillas del Campo. Los trabajos de esta vía se adjudicaron a la Unión Temporal de Empresas Sacyr-Rayet, con un presupuesto de 16,73 millones de euros, en un plazo de ejecución de dos años.
La conexión de los polígonos será una vía con una longitud de algo más de cuatro kilómetros y medio, que dispondrá de dos calzadas separadas, y enlaces con las carreteras de Guadalajara a Marchamalo (CM-1002), la que une la capital con Cabanillas (CM-1007), la carretera de la Vega (CM-1008) y la N-320. Cada calzada constará de dos carriles de 3,50 metros, con un arcén interior de un metro y otro exterior de 2,50 metros. Las calzadas están separadas por una mediana de tres metros.
La vía de conexión de los polígonos supone la continuación de la Ronda Norte hasta la carretera N-320 en los municipios de Guadalajara y Cabanillas del Campo. Puesto que la Junta ya actuó en la calle Francisco Pizarro, la obra comenzará en la intersección con la carretera de Marchamalo. En ésta se construye una glorieta de 60 metros de diámetro interior y dos calzadas y sobre ella cruzará la carretera de Marchamalo. Los ramales de acceso desde la carretera CM-1002 a la glorieta tendrán una longitud de 300 metros en todos los sentidos.
El primer tramo de la vía, que va desde la CM-1002 (Marchamalo) hasta la CM-1007 (Cabanillas), cuenta con una longitud total de 1.893 metros, y terminará en el enlace con la carretera de Cabanillas, en donde se ejecutará una glorieta elíptica sobre la que cruzará la carretera de Cabanillas. Por su parte, el segundo tramo, que va de la carretera de Cabanillas a la N-320, tiene una longitud de 2.697 metros. Comenzará en la glorieta antedicha y terminará en el enlace con la N-320, mediante una glorieta desde la que saldrá un ramal de 420 metros de longitud y una única calzada (con dos carriles) que conectará con la carretera de la Vega. Además, toda la vía irá iluminada y cercada, y dispondrá en la mayor parte de su recorrido de caminos de servicio paralelos a ella para acceso a las propiedades colindantes. Además, se construirá un paso inferior para dar continuidad a un camino.