Comité y dirección de Infinity System negocian un ERE temporal
01/10/2010 - 09:45
Por: M.TOVAR ATANCE
CABANILLAS DEL CAMPO
Dirección y Comité de Empresa de Infinity System están negociando un ERE de suspensión de empleos que afectará a 115 de los 131 trabajadores de la planta de Cabanillas del Campo, según la propuesta presentada la semana pasada a los representantes sindicales y que ya conocen los empleados. Este expediente de regulación prevé la suspensión de una semana de trabajo cada mes durante el semestre siguiente a la firma del acuerdo del más del centenar de los trabajadores, que durante el tiempo que no trabajen pasarán a estar en el paro.
Las negociaciones acaban de comenzar y la presidenta del Comité de Empresa, María Jumilla, prevé que en breve llegarán a un acuerdo porque la relación con la empresa, dijo, está siendo muy tranquila y cordial. Está habiendo entendimiento y se está buscando la forma de afectar lo menos posible a los trabajadores. La oferta ha sido bastante buena, según Jumilla.
La presidenta del Comité de Empresa no teme, sin embargo, que este expediente sea el paso previo a los despidos, aunque no quiere decir que lo vayan a hacer. Según Jumilla, la empresa tienen unos proyectos que esperan salgan adelante y si salen mantenernos a todos, y si no, tendrán que tomar otras medidas, pero no creo que sea esa la intención. Esta situación es el resultado, según les han informado, de la disminución de las ventas y el volumen de trabajo. En este sentido, María Jumilla asegura que la opción elegida es la menos sangrante para la plantilla.
La presidenta del Comité de Empresa no teme, sin embargo, que este expediente sea el paso previo a los despidos, aunque no quiere decir que lo vayan a hacer. Según Jumilla, la empresa tienen unos proyectos que esperan salgan adelante y si salen mantenernos a todos, y si no, tendrán que tomar otras medidas, pero no creo que sea esa la intención. Esta situación es el resultado, según les han informado, de la disminución de las ventas y el volumen de trabajo. En este sentido, María Jumilla asegura que la opción elegida es la menos sangrante para la plantilla.