Corbacho busca la complicidad de empresarios y sindicatos

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Celestino Corbacho, durante el acto en el que tomó posesión de su nuevo cargo como ministro de Trabajo, aboga por el diálogo con empresarios y sindicatos desde “las primeras horas” de su mandato aunque todavía no ha fijado fecha para una primera toma de contacto. Por su parte, Jesús Caldera, el ministro de Trabajo de la anterior legislatura, le recordó “el valor inmenso del diálogo social” porque es “una parte esencial de nuestro modelo de libertad”.
El nuevo ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, instó a empresarios y sindicatos a ser cómplices de su política, tras asegurarles que el diálogo social (ámbito de debate y negociación entre Gobierno, patronales y centrales) estará presente “desde las primeras horas” de su mandato”. No obstante, posteriormente aseguró que pese a la urgencia de mantener una primera reunión todavía no hay fecha para el encuentro. Las declaraciones de Corbacho tuvieron lugar durante su toma de posesión con la que relevó a Jesús Caldera al frente del Departamento.
Precisamente, el acto tuvo dos protagonistas, el ministro saliente y el entrante. Caldera se mostró entusiasmado con su cometido ideológico en el PSOE y elogió la persona de su sucesor. A la toma de posesión de Corbacho asistieron también el vicepresidente segundo, Pedro Solbes y la titular de Administraciones Públicas, Elena Salgado.
Tampoco quisieron estar ausentes los líderes de CCOO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez. Por el contrario, el presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, quien en los últimos días ha insistido en que se encuentra muy satisfecho con los responsables del equipo económico del Gobierno, no acudió.
“Vengo aquí a aprender de todos. Soy consciente de que hay retos importantes en el futuro inmediato. Nunca hay que fijarse ni ahogarse con los problemas porque son retos y éstos tienen que dar el ánimo suficiente para poder gobernarlos, algo que nunca se puede hacer solo”, recalcó Corbacho. Recordó que su experiencia proviene del área local, de los barrios, y que, aunque ha estado en contacto directo con los ciudadanos, llega a Trabajo “a aprender”.

Desafíos
Tampoco le preocupan los desafíos generados por la inmigración. Agradeció a su antecesor haber hecho posible que España se haya situado entre los países más desarrollados del mundo en materia de protección de los derechos constitucionales, tanto en lo relacionado con el empleo, la Seguridad Social o con los movimientos migratorios de población.
Por su parte, Jesús Caldera, el ministro saliente, definió a su sucesor como “una persona muy capaz y formidable” que mejorará el trabajo emprendido en 2004. Le recordó “el valor inmenso del diálogo social” porque a lo largo de su mandado “nunca ha sido un instrumento para el entendimiento” sino “una parte esencial de nuestro modelo de libertad y una fuente extraordinaria para el desarrollo económico y del bienestar social del país” y se ofreció como el primer cooperador de Celestino Corbacho.