Corbacho dice se compensará a los pensionistas pasado el bache
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
RECORTES
El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, pidió ayer a los pensionistas que no tengan ninguna duda de que, pasado el bache económico, sus pensiones seguirán subiendo en la misma línea en la que lo han hecho en los últimos años.
No obstante, el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, consideró que la reforma de las pensiones no supondrá una mejora de las cifras del déficit público, pero tendrá una influencia poderosa en la recuperación de la confianza y deslizó que lo óptimo sería elevar la edad de jubilación.
Durante su comparecencia en la Comisión del Pacto de Toledo para explicar la decisión del Gobierno de congelar las pensiones para 2011, Corbacho aseguró que, cuando se salga de la situación económica actual, se haya corregido el déficit y el PIB se adentre en la senda de crecimiento, este Gobierno sabrá compensar aquellas medidas de coyuntura que tuvo que adoptar en su momento. El ministro se quedó solo (únicamente le apoyó el PSOE) en la defensa de la congelación de las pensiones para 2011, medida que se incluyó en el decreto de reducción del déficit y que ha sido calificada hoy por todos los Grupos de la oposición de injusta, injustificable e innecesaria. Además, muchos de ellos han puesto en cuestión el Pacto de Toledo tras esta decisión unilateral del Gobierno.
Durante su intervención, Corbacho afirmó que el Ejecutivo socialista se siente legitimado para pedirle un esfuerzo a los pensionistas porque ningún Gobierno ha hecho tanto por ellos como el actual. De hecho, destacó que desde que el PSOE llegó a La Moncloa las pensiones han subido un 34,9 por ciento, frente al incremento del 3,1% que experimentaron durante la era de José María Aznar.
El titular de Trabajo recordó además que la congelación de las pensiones no afectará a los pensionistas con rentas más bajas y subrayó que, a la hora de tomar esta decisión, el Gobierno ha tenido en cuenta que las previsiones de inflación para 2011 son moderadas. Prácticamente no habrá pérdida del poder adquisitivo, al ser ésta irrelevante, aseveró. Preguntado por cuándo estará lista la reforma de pensiones, el ministro dijo en los pasillos del Congreso que eso dependerá de la Comisiónn del Pacto de Toledo, aunque confió en que en dos o tres meses puedan estar terminadas las recomendaciones que guiarán dicha reforma.
A nosotros nos gustaría que lo antes posible, pero el Gobierno no quiere presionar a los Grupos. Parecería razonable que en los próximos dos o tres meses tuviéramos ya las recomendaciones para ver la dirección en la que debería caminar la futura reforma de las pensiones, explicó.
Corbacho confió en que las propuestas que salgan de la Comisión no desnaturalicen de manera importante el documento de propuestas del Gobierno, en el que, entre otras medidas, se aboga por ampliar de 65 a 67 años la edad legal de jubilación.
En cualquier caso, señaló que el Ejecutivo dará más valor a que los Grupos Parlamentarios lleguen al consenso y al acuerdo que al mantenimiento inamovible de lo que está en el texto del Gobierno, pero siempre que no signifique una renuncia a todas las materias que el Gobierno plantea que deben reformarse, insistió.
LA REFORMA LABORAL SE CUELA EN EL DEBATE.
Las explicaciones del ministro en torno a la congelación de las pensiones no convencieron al resto de Grupos de la Cámara, que reprocharon a Corbacho que el Gobierno haya incumplido del Pacto de Toledo y que haya tomado esta medida por las imposiciones de Bruselas y los mercados.
En este sentido, el portavoz del PP en esta Comisión, Tomás Burgos, advirtió al ministro de que el Pacto de Toledo se encuentra en una situación enormemente delicada, de la que no se sabe si saldrá con vida. También IU, UPyD, CiU y PNV avisaron a Corbacho de la gravedad que ha supuesto violentar el Pacto de Toledo al congelar las pensiones para 2011.
El portavoz de IU, Gaspar Llamazares, expresó su profunda desconfianza hacia el Gobierno y le recordó que, con medidas como ésta, el Ejecutivo podrá ganarse la confianza de los mercados, pero no la de los ciudadanos y los trabajadores. Los mercados no votan, votan los ciudadanos, recordó.
Durante su comparecencia en la Comisión del Pacto de Toledo para explicar la decisión del Gobierno de congelar las pensiones para 2011, Corbacho aseguró que, cuando se salga de la situación económica actual, se haya corregido el déficit y el PIB se adentre en la senda de crecimiento, este Gobierno sabrá compensar aquellas medidas de coyuntura que tuvo que adoptar en su momento. El ministro se quedó solo (únicamente le apoyó el PSOE) en la defensa de la congelación de las pensiones para 2011, medida que se incluyó en el decreto de reducción del déficit y que ha sido calificada hoy por todos los Grupos de la oposición de injusta, injustificable e innecesaria. Además, muchos de ellos han puesto en cuestión el Pacto de Toledo tras esta decisión unilateral del Gobierno.
Durante su intervención, Corbacho afirmó que el Ejecutivo socialista se siente legitimado para pedirle un esfuerzo a los pensionistas porque ningún Gobierno ha hecho tanto por ellos como el actual. De hecho, destacó que desde que el PSOE llegó a La Moncloa las pensiones han subido un 34,9 por ciento, frente al incremento del 3,1% que experimentaron durante la era de José María Aznar.
El titular de Trabajo recordó además que la congelación de las pensiones no afectará a los pensionistas con rentas más bajas y subrayó que, a la hora de tomar esta decisión, el Gobierno ha tenido en cuenta que las previsiones de inflación para 2011 son moderadas. Prácticamente no habrá pérdida del poder adquisitivo, al ser ésta irrelevante, aseveró. Preguntado por cuándo estará lista la reforma de pensiones, el ministro dijo en los pasillos del Congreso que eso dependerá de la Comisiónn del Pacto de Toledo, aunque confió en que en dos o tres meses puedan estar terminadas las recomendaciones que guiarán dicha reforma.
A nosotros nos gustaría que lo antes posible, pero el Gobierno no quiere presionar a los Grupos. Parecería razonable que en los próximos dos o tres meses tuviéramos ya las recomendaciones para ver la dirección en la que debería caminar la futura reforma de las pensiones, explicó.
Corbacho confió en que las propuestas que salgan de la Comisión no desnaturalicen de manera importante el documento de propuestas del Gobierno, en el que, entre otras medidas, se aboga por ampliar de 65 a 67 años la edad legal de jubilación.
En cualquier caso, señaló que el Ejecutivo dará más valor a que los Grupos Parlamentarios lleguen al consenso y al acuerdo que al mantenimiento inamovible de lo que está en el texto del Gobierno, pero siempre que no signifique una renuncia a todas las materias que el Gobierno plantea que deben reformarse, insistió.
LA REFORMA LABORAL SE CUELA EN EL DEBATE.
Las explicaciones del ministro en torno a la congelación de las pensiones no convencieron al resto de Grupos de la Cámara, que reprocharon a Corbacho que el Gobierno haya incumplido del Pacto de Toledo y que haya tomado esta medida por las imposiciones de Bruselas y los mercados.
En este sentido, el portavoz del PP en esta Comisión, Tomás Burgos, advirtió al ministro de que el Pacto de Toledo se encuentra en una situación enormemente delicada, de la que no se sabe si saldrá con vida. También IU, UPyD, CiU y PNV avisaron a Corbacho de la gravedad que ha supuesto violentar el Pacto de Toledo al congelar las pensiones para 2011.
El portavoz de IU, Gaspar Llamazares, expresó su profunda desconfianza hacia el Gobierno y le recordó que, con medidas como ésta, el Ejecutivo podrá ganarse la confianza de los mercados, pero no la de los ciudadanos y los trabajadores. Los mercados no votan, votan los ciudadanos, recordó.