Corbacho ve útiles ante la crisis los EREs y las prejubilaciones

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Los expedientes de regulación de empleo y las prejubilaciones sirven de forma excepcional para paliar los efectos de la crisis económica, según el titular de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho. Partidario de que el Banco Central Europeo (BCE) baje los tipos de interés y de que sean los bancos y cajas quienes aporten liquidez a las empresas en lugar del Gobierno, el ministro descartó resultados inmediatos del diálogo social.
Las declaraciones de Corbacho tuvieron lugar durante un desayuno de trabajo. En paralelo, la Seguridad Social publicó sus cuentas, que arrojaron un saldo positivo de 15.971,38 millones de euros en los ocho primeros meses (enero a agosto), 620,84 millones más que en el mismo periodo de 2007. Este superávit es la diferencia entre unos ingresos de 84.025,86 millones y unos gastos de 68.054,48 millones, cantidades que en términos interanuales presentaban un incremento del 8,9% y del 10,11%, respectivamente.
El ministro negó tener «una opinión negativa» de los expedientes de regulación de empleo (ERE) presentados en la automoción, puesto que “correctamente aplicados ayudan”. “Es lógico que las empresas y los trabajadores tengan instrumentos para salir de la crisis”, insistió. Y sobre las críticas que lanzó en junio contra la utilización de estos mecanismos de ajuste de plantilla, ahora argumentó que entonces la amenaza de un ERE respondía a la huelga del transporte y se le hacía difícil comprender que el paro suponía la crisis del sector.

Carácter excepcional
También justificó la presentación de tres ERES –Iveco, Ford y General Motors— en los últimos días. A su juicio, la reestructuración laboral perseguida obedece a que las áreas de distribución y venta en el sector de la automoción deben adaptarse a la búsqueda de nuevos productos y modelos. «No creo que haya habido coordinación y sí coincidencia», matizó.
Corbacho igualmente defendió las prejubilaciones con carácter excepcional porque “son un buen instrumento para salir de una crisis” y reclamó un debate “sereno” sobre el retiro laboral anticipado. Lamentó que muchas empresas arrinconen a los trabajadores mayores de 50 años en un rincón «como si fueran un jarrón chino» en lugar de valorar su experiencia. No obstante, los cambios a introducir en la jubilación se debatirán en el congreso de los diputados, en la comisión del Pacto de Toledo (acuerdo parlamentario de 1975 para ‘proteger’ el sistema público de pensiones).
A lo largo de su intervención, la lista de temas abordados fue bastante larga. Por ejemplo, se mostró partidario del actual modelo de negociación colectiva y de debatir el absentismo dentro de la productividad y junto con las inversiones tecnológicas y la formación profesional, a la vez que anunció el incremento del paro durante los próximos meses. E hizo hincapié en que sería «prudente y saludable» que el BCE bajara los tipos de interés y ajustara el precio del dinero y en que, en contra de lo solicitado por el presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, al Gobierno no le corresponde adoptar «medidas excepcionales» para paliar la crisis financiera. «Deben ser el propio mercado y las propias entidades financieras, dentro del límite de sus posibilidades, las encargadas de aportar liquidez a las empresas», expuso.
En el amplio abanico de materias tratadas este martes por el titular de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, figuró el incremento salarial de los empleados públicos para 2009. El ministro negó que se trate de un aumento del 3,8% y limitó la subida al 2%. Aclaró que lo único que se eleva el 3,8% es la masa salarial del colectivo y desglosó este porcentaje en un 2% de subida de carácter general; en un 1% para acercar el importe de las pagas extraordinarias a la nómina mensual; en un 0,50% para el fondo de pensiones existente; y en un 0,3% para los fondos adicionales que afectan tan sólo a determinados trabajadores.