De la ciudad al pueblo

03/07/2022 - 09:43 Pedro Villaverde Martínez

 Muchos hijos del pueblo y otros afines van a trasladar su forma de descanso a los pueblos desde este mismo fin de semana con la llegada de julio y en ellos buscarán ocio y diversión.

Nuestros pueblos, de los que nuestro periódico viene cada semana ocupándose en sus páginas, a los que  hemos dedicado varios coleccionables, verdadera historia de nuestra provincia, sin contar todos nuestros especiales de fiestas, van a despertar del letargo, o mejor monotonía invernal, y van a verse invadidos en el mejor sentido de la palabra, por cientos o miles de personas en busca de sus raíces una vez más, de temperatura más fresca, de nuevas convivencias...  Muchos hijos del pueblo y otros afines van a trasladar su forma de descanso a los pueblos desde este mismo fin de semana con la llegada de julio y en ellos buscarán ocio y diversión.  Con la música a otra parte podríamos decir. De la capital a los pueblos.                                                                                           

  No son ya nuestros pueblos los de antes. Las gallinas ya no corretean por las calles, ni se oye el canto del gallo al alba, ni el cuerno del cabrero, ni el paso herrado de las caballerías camino de la dura jornada de trabajo...  Este regreso estival, que hace cobrar nueva vida a nuestros pueblos, hace revivir a los más mayores todas estas imágenes y estampas, a la vez que celebrar muchas de las tradiciones que quieren permanecer vivas. Algunas se trasladan de fechas en el ánimo de que no desaparezcan. Y, aunque es conocida la frase de “a mi santo que no me lo toquen”, todos se ponen de acuerdo para celebrarlo en la fecha más idónea...Cada fin de semana suele ser un ensayo de verano anticipado.

Tanto trasiego de público conlleva riesgos en nuestras carreteras y bosques que debemos evitar en lo posible. Los pueblos son los pulmones de nuestras ciudades. Prudencia,  precaución y sumo cuidado se hacen imprescindibles. Tal vez no encontremos en el pueblo esas idílicas estampas antes citadas, pero sí unos paisajes para disfrutar, la paz de siempre, fiestas, de nuevo,  cada vez más programación de ocio y a nuestros paisanos.