Despedida a 35 niños ucranianos acogidos
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
La diputada delegada de Bienestar Social, Igualdad y Ciudadanía, Ana Fabián, asistió ayer en el Centro San José a la despedida de los 35 niños ucranianos, de edades comprendidas entre los seis y los 16 años, que han pasado todo este mes de agosto las vacaciones, acogidos por familias de la provincia de Guadalajara.
Todos ellos recibieron un regalo de la Diputación provincial, consistente en una bolsa con un balón, una camiseta y un cuaderno. Ana Fabián agradeció a todos ellos su estancia. Es bueno que se integren en otras culturas; que conozcan otras formas de vida y que el pueblo español esté dispuesto a ayudarles, opina Fabián, que destaca además la importancia de estos muchachos como transmisores de nuestra cultura más allá de nuestras fronteras, haciendo del nuestro un país atractivo, hospitalario y solidario.
Esta iniciativa tiene el respaldo económico de Diputación. El año pasado la Institución provincial concedió una subvención por valor de 3.000 euros al colectivo encargado de las gestiones para que puedan llegar a nuestro país, AFAN (Asociación Familiar de Ayuda a un Niño), de la misma forma que viene haciendo durante los últimos años.
Se acaban así unas vacaciones en las que, además de conocer la cultura española, estos 35 niños ucranianos han tenido la oportunidad de someterse a chequeos médicos y, aquellos que lo hubieran necesitado, a tratamientos para curar o paliar sus enfermedades, de tal forma que regresen a su país de origen en el mejor estado de salud posible.
Esta iniciativa tiene el respaldo económico de Diputación. El año pasado la Institución provincial concedió una subvención por valor de 3.000 euros al colectivo encargado de las gestiones para que puedan llegar a nuestro país, AFAN (Asociación Familiar de Ayuda a un Niño), de la misma forma que viene haciendo durante los últimos años.
Se acaban así unas vacaciones en las que, además de conocer la cultura española, estos 35 niños ucranianos han tenido la oportunidad de someterse a chequeos médicos y, aquellos que lo hubieran necesitado, a tratamientos para curar o paliar sus enfermedades, de tal forma que regresen a su país de origen en el mejor estado de salud posible.