Detenidos cinco presuntos implicados en el asesinato del empresario mondejano

Cuatro de los cinco detenidos, tres de ellos de Mondéjar –uno trabaja en la localidad de Albares- son presuntamente los que subieron a la casa de la madre, a la que robaron, entre otros efectos, dos relojes, y los que, posteriormente, asustados ante su presencia, participaron en el asesinato por asfixia de Antonio Montoya. Ahora la Guardia Civil indaga sobre el paradero del sexto, que presuntamente fue uno de los que vigiló a las puertas de la casa, para avisarles sobre la presencia de la Guardia Civil.

Los capturados, cuatro hombres y una mujer, tienen una media de edad que oscila entre los 23 y 24 años. "Sospechábamos totalmente de ellos desde el principio", indica Javier Montoya, hermano de la víctima, quien añade que "creo que no le pensaban matar", porque la situación les superó "y a mi hermano, que en paz descanse, no le llegaron a robar". A su juicio, esta detención "supone un alivio relativo, porque el daño psicológico, moral y económico, ya que tuve que cerrar el negocio debido a que me tuvieron ingresar por una enorme depresión, no me lo puede reponer nadie". Javier insiste en que el cierre de Muebles Montoya "tuvo mucho que ver con eso". Recuerda que el hecho de que les acusaran de que el crimen se debió a un ajuste de cuentas le acarreó numerosos problemas financieros y que fue la clave para su ruina personal y la de su familia. Uno de los problemas adicionales que se encontró fue el hecho de que "al fallecer mi difunto hermano, no tuve capacidad para firmar determinados documentos vitales para que la empresa pudiera proseguir". Sin embargo, asegura que "hemos estado dando la cara y hemos resuelto el 75% de nuestros compromisos con los clientes y el 80% con los proveedores".
"No es la primera vez que este grupo de vecinos comete fechorías, de hecho ya estaban fichados por la Guardia Civil de la localidad", concluye.