Detenidos los presuntos autores del robo de una treintena de ovejas y un centenar de cencerros
10/02/2016 - 13:16
El propietario de una explotación ganadera de Fuentenovilla (Guadalajara), denunció el robo de una treintena de cabezas de ganado ovino, una centena de cencerros, herramientas, efectos relacionados con el sector ganadero y un perro de la raza Border Colley.
Con el desarrollo de la investigación, la Guardia Civil de Mondéjar (Guadalajara), barajó la posibilidad de que los animales sustraídos pudieran haber sido trasladado a otras explotaciones ganaderas de provincias limítrofes, por lo que pasó información a las diferentes Unidades.
Así fue como la Guardia Civil de Herrera del Duque con la colaboración del SEPRONA de esa misma localidad, llevaron a cabo una laboriosa investigación con las que se sospecho que los animales se encontrarían en una finca del municipio pacense de Bonal- Helechosa, regentada por dos personas a los que les constan antecedentes por hechos similares.
En el citado lugar, el SEPRONA trató de identificar el estado de los animales que se encontraban en la explotación y donde los agentes hallaron en el cuello de diversos animales, cencerros con grabaciones en relieve de la marca identificativa y coincidente con los denunciados en la explotación de Fuentenovilla (Guadalajara), reconocidas posteriormente por su legitimo propietario.
Tras la detención de dos de los supuestos autores del robo, se pudo averiguar que contaron con la colaboración de otras tres personas, vecinos de Mondejar y Mejorada del Campo, y que presuntamente tras sustraer el ganado, los trasladaron a la explotación pacense con el objetivo de camuflarlas en la misma, para su posterior venta o sacrificio.
Una vez identificados los otros tres integrantes del grupo, a principios del presente mes, con la colaboración de la Guardia Civil de Mondejar, se les localizó y detuvo en sus localidades de residencia.
Ahora la Guardia Civil investiga si los ahora detenidos, al sentirse descubiertos por la Guardia Civil, sacrificaron o vendieron el perro que sustrajeron en la explotación, todo ello para evitar pruebas que les implicaran en el hecho delictivo, por lo que también se les podrían implicar por un supuesto delito de maltrato animal.