Dos asesores del Defensor del Pueblo recaban datos en el centro de O´Belén

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
La niña fallecida el domingo fue enterrada ayer en Ciudad Real
El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, informó ayer de que desde su institución se han comenzado a tomar medidas para esclarecer la muerte de la niña de 14 años que se arrojó del coche en marcha cuando se dirigía a la Casa Joven de Azuqueca de Henares, gestionada por la Fundación O´Belén, y recordó que en dicho centro ya se habían observado irregularidades.
En declaraciones a Europa Press, Múgica precisó que tanto el fiscal, como el juzgado y el Defensor del Pueblo están investigando el caso y que dos asesores de la institución que él dirige han sido enviados al centro “para verlo in situ”, con el fin de recabar información y esclarecer las circunstancias que llevaron a la niña a arrojarse “del coche o de la furgoneta que le trasladaba al centro de menores”. En cuanto a las irregularidades, el Defensor del Pueblo destacó que “lo más curioso del caso es que el centro de Azuqueca, junto con otros centros regentados por la misma empresa, ha recibido la peor calificación” en el informe presentado a las Cortes Generales.
Finalmente, el Defensor subrayó que, aunque el centro de Azuqueca de Henares “ha prometido que se van a hacer las correcciones necesarias”, ahora el problema “es saber si ha cumplido con las correcciones”.
Mientras tanto, el cuerpo de la menor recibió ayer sepultura en su ciudad natal, Ciudad Real. A las 17.00 horas tuvo lugar el funeral en la iglesia de El Pilar, a donde se desplazaron decenas de familiares, de etnia gitana, muchos de ellos pequeños. La llegada del vehículo funerario sembró el silencio ante los presentes, aunque se rompió cuando llegó a la iglesia el padre de la niña en un coche de la Policía Nacional, y custodiado por dos agentes. Minutos después, hacía su aparición, en otro vehículo policial, la madre. Entonces se vivieron momentos emotivos, cuando algunos familiares rompieron el cerco policial para abrazar a los padres, que se encuentran actualmente en prisión. Posteriormente el cuerpo recibía sepultura en el cementerio de Ciudad Real.