Los actos del 350 aniversario de la llegada de los tapices a la Colegiata de Pastrana llega al Centro San José
El 18 de mayo de 1667, reunidos el deán y el cabildo de la Colegiata, leyeron una carta de Rodrigo Díaz de Vivar de Silva y Mendoza, IV Duque de Pastrana, anunciando que enviaba al templo seis tapices, los cuatro de la serie del rey Alfonso V de Portugal referentes a las conquistas de Arcila y Tánger, y los dos de Alcázar Seguer. Los tapices llegarían a su destino en los primeros días de junio.
Hoy, Pastrana no se entiende, trescientos cincuenta años después, sin aquellos tapices, de la misma manera que resulta imposible estudiar la historia de estas obras de arte sin vincularlas a la Villa Ducal. Por este motivo, el Museo de Tapices, la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara, Junta de Comunidades, Diputación Provincial, Real Fábrica de Tapices, Fundación Carlos de Amberes, Universidad de Alcalá de Henares, el Estudio de Conservación y Restauración de Tapices Pepa Garrido, S.L., Asociación Cultural More Hispano y propio Ayuntamiento de Pastrana colaboran en un programa de actos que tiene como fin último la divulgación de este tesoro histórico y artístico, y consecuentemente, la promoción de la Villa Ducal. Además de otras muchas actividades, que se encargó ayer de resumir el párroco local, Emilio Esteban en su presentación, se ha organizado un ciclo de conferencias que se desarrolla en tres sedes: Madrid, Guadalajara y Pastrana. Ocho eruditos están abordando desde diferentes perspectivas, históricas y artísticas, la valía de las telas.
Esta semana, empezando por la tarde de ayer, daban comienzo las seis que a lo largo de tres días acoge el Centro San José de la capital provincial. Fue Plácido Ballesteros, como responsable de los servicios culturales de la Diputación, quien dio la bienvenida al ciclo en su calidad de anfitrión.
En primer lugar, Miguel Angel Bunes, profesor de investigación del CSIC, y concretamente del Centro de Ciencias Humanas y Sociales, CCMS, Instituto de Historia disertó una interesante conferencia sobre la historia portuguesa de los Tapices de Pastrana, “que inicialmente no tiene nada que ver con Pastrana, pero que acaba teniéndolo”. Con todo lujo de detalles, Bunes explicó por qué el rey Alfonso V, y sus ascendentes y descendentes, quisieron cruzar el estrecho de Gibraltar, cuando terminaron la reconquista de sus territorios a los árabes y, “en primer lugar, llevar a cabo una empresa memorable, para después gastar una fortuna en que fueran tejidos cuatro tapices maravillosos y enormes que ahora tenemos la suerte de poder admirar ahora en Pastrana”. El profesor destacó que las telas narran un acontecimiento real, algo prácticamente inédito hasta entonces. “Otros tapices contemporáneos relatan hechos mitológicos, o de un pasado lejano, cuando los de Pastrana cuentan la conquista de dos ciudades del Norte de Africa, dando a entender que, según la mentalidad de la época, son tan importantes como las hazañas de Hércules o de Alejandro Magno”.
A continuación, y presentada igualmente por Emilio Esteban, intervino Esther Alegre, profesora de la UNED. La docente habló sobre un aspecto de las telas poco estudiado, como es el de 'Los tapices de Pastrana como vestigio simbólico legitimador del linaje ducal de los Silva-Mendoza'. “Aunque en el imaginario colectivo sí que está presente la ligazón que hay entre los tapices y la Casa Ducal de Pastrana, el linaje de los Silva-Mendoza, como objeto de estudio es menos conocida”, afirmó.
Así, las telas narran las hazañas del rey Alfonso V de Portugal, en el norte de Africa, en las que participó un ancestro de Ruy Gómez de Silva, del príncipe de Eboli, circunstancia que resultó decisiva para que le fuera concedido el título nobiliario como señor de La Chamusca y de Ulme. Cuando llega a Castilla, Ruy contrae matrimonio con Ana de Mendoza y de la Cerda, perteneciente a uno de los linajes más encumbrados del reino. Parece entonces que no le fuera a ser necesaria toda la historia genealógica anterior sobre su nobleza portuguesa.
Sin embargo, Alegre puso sobre el tapete que, llegado el momento, se produjo la circunstancia histórica de unir las coronas de Portugal y Castilla, algo que realmente sucedería en la persona de Felipe II. “Es entonces cuando cobra una importancia capital el origen portugués del linaje de los Silva-Mendoza. Felipe II se convierte en rey de Portugal y benefició a los linajes portugueses que apoyaron su causa. Uno de ellos fue la Casa Ducal de Pastrana, que quiso entonces demostrar el origen de su linaje. Así fue como los tapices se convierten en prueba de ello”, expuso.
Los hechos sobre dónde permanecieron las telas durante la mayor parte de los siglos XVI y XVII, hasta que fueron donados a la Colegiata de Pastrana, son poco claros. En realidad, su recorrido en aquel tiempo es aún un misterio. Desde su encargo, por parte del Rey de Portugal, no se sabe con certeza cómo llegan a Castilla. Por eso es difícil establecer esa secuencia histórica. En cualquier caso, argumentó la profesora pastranera, “sí podemos pensar que hubo un gran interés por conseguirlos por parte de la familia Silva-Mendoza, puesto que hablan abiertamente de su conexión con la monarquía portuguesa”. En este sentido, los tapices se convirtieron en elementos simbólicos que legitimaban el origen de los Silva-Mendoza como miembros de las dos casas reales, la de Portugal y la de Castilla, algo que concedió enormes oportunidades políticas a los duques de Pastrana.
Fue el IV Duque de Pastrana, Rodrigo de Silva y Mendoza, quien los deposita en la Colegiata en los primeros días de junio de 1667, algo que se produjo en un momento sumamente importante en la historia del árbol genealógico del linaje de la Casa de Pastrana, puesto que Rodrigo poco antes, por su casamiento, había pasado a ser el VIII Duque del Infantado, quedando así la Casa de Pastrana ligada a la del Infantado, de un rango mayor.
Anteriormente, en 1640, se había producido la secesión de la Corona portuguesa de la castellana, proclamándose Juan IV rey de Portugal. Por este motivo, la necesidad de legitimar el origen portugués de la Casa de Pastrana “ya no era necesario, ni probablemente conveniente”, puntualizó Alegre, en 1667. Fue entonces cuando el IV Duque hizo la entrega, para que se custodiaran y guardaran en la Colegiata de Pastrana, y se utilizaran, de forma simbólica para las fiestas del Corpus Christi de la Villa Ducal, los tapices que narran las hazañas de Alfonso V de Portugal.
Las conferencias de hoy y mañana
Miércoles 7 de junio. 20 horas. Centro San José. Guadalajara.
Conferencia 'Los tapices de la conquista de Arcila y Tánger por Alfonso V de Portugal', a cargo de Antonio Herrera Casado, cronista provincial. Expone Herrera una visión completa de los cuatro grandes paños pastraneros que relatan la conquista de las ciudades de Arcila y Tánger por Alfonso V de Portugal. Y describe sus formas, contenidos y detalles, desde las vestimentas de los soldados, a las insignias reales. La charla es complementada con una nutrida serie de imágenes, proporcionando una visión tanto del aspecto artístico como del histórico de estos tapices, que antes de llegar a Pastrana estuvieron colgados de las paredes de los salones del palacio del Infantado.
Además, esta tarde, también en el Centro San José, a partir de las 20 horas, se presentará la comunicación 'Los tapices de Pastrana durante la Guerra Civil. Protección, restauración y reproducción', a cargo de Juan Gabriel Ranera Nadador, investigador e historiador.
Ranera hablará sobre las vicisitudes de los Tapices en el siglo XX, su protección, reproducción y devolución a la Iglesia Colegiata de Pastrana. Los tapices salieron de Pastrana en la Segunda República, por orden de Manuel Azaña. Con el estallido de la Guerra Civil, las telas fueron protegidas y escondidas en Valencia, en las Torres de Serrano. Fueron trasladadas después a Cataluña, y más tarde a Ginebra, a la sede de Naciones Unidas. Con el fin de la Guerra, fueron devueltos al gobierno de Franco. Hasta 1945 no se iniciaron las gestiones para que fueran restaurados y se reprodujeran. Una comisión de Ayuntamiento y pastraneros convenció a Franco para que los devolviera a Pastrana.
Jueves, 8 de junio. 20 horas. Centro San José. Guadalajara.
Mañana jueves, tendrá lugar la conferencia 'Pastrana y la tapicería: los tapices de Alfonso V de Portugal y su partida de Lagos', a cargo de Margarita García Calvo. La historiadora de los tapices de Pastrana hablará de la Villa Ducal como lugar de referencia en el mundo de tapicería por dos motivos, en primer lugar por los tapices que se conservan en el Museo Parroquial, pero también por la manufactura, patrocinada por el III Duque de Pastrana, en el XVII, que produjo interesantes piezas que se encuentran en diferentes instituciones de España y de otros países europeos.
Se presentará también la comunicación 'Restauración de los tapices de Alcázar-Seguer', a cargo de Pepa Garrido Medina, restauradora de tapices.