El apoyo a escritores y editores
No olvidemos que en tiempos o lugares no democráticos los gobiernos limitan el acceso a los libros y buscan el control de los medios de comunicación para que las personas no piensen por sí mismas.
Preocupa el descenso en el número de lectores que apuntan las estadísticas, en particular entre las personas jóvenes y por eso resulta de especial relevancia la celebración de días como el 23 de abril o la feria del libro que ha tenido lugar este fin de semana en el parque de la Concordia, lugar espacioso y agradable para pasear entre los stand de más de veinte libreros y editoriales teniendo la oportunidad de adquirir una docena de libros firmados por su autor en el propio momento. La feria, beneficiada sin duda por el buen tiempo y el desarrollo de numerosas actividades durante su horario, algunas relacionadas con la lectura y otras con la cultura en general, organizadas por diferentes colectivos locales, con el respaldo de las universidades, ha puesto de manifiesto el interés o al menos la curiosidad del público por los libros, así como la variedad de escritores y empresas editoras que hay en nuestra provincia. Es precisa, mucho en estos tiempos, la labor de apoyo y divulgación a un sector que tanto contribuye con su arte a mejorar el nivel cultural y educativo de las personas. No olvidemos que en tiempos o lugares no democráticos los gobiernos limitan el acceso a los libros y buscan el control de los medios de comunicación para que las personas no piensen por sí mismas, sigan el redil marcado, no aspiren a tener libertad de expresión, opinión y manifestación, no reivindiquen sus derechos ni intenten vivir en una sociedad mejor, más justa, más igual. La lectura, el conocimiento, el saber, hacen más fuertes, menos manejables, más libres, más críticos, más felices, a quienes la practican y por ello debemos potenciar los clubes de lectura, las actividades de las bibliotecas, ayudar a la publicación, convocar concursos o premios literarios, impulsar iniciativas que animen a los más pequeños y a la sociedad en general para que se sumerjan en las historias que ofrece un libro o en las informaciones de los periódicos, en definitiva estimular y favorecer la lectura.Trabajemos por una Guadalajara lectora para que sea un poco mejor.