El arranque del Plan Astra hace estallar el conflicto abierto entre la Junta y el Ayuntamiento capitalino

La Policía Local de Guadalajara denunció a decenas de autobuses de dicho Plan Astra que hicieron parada en las cercanías de la estación de Renfe y en el Hospital Universitario, haciendo valer la postura del Ayuntamiento capitalino, que se opone a que dicho plan realice parada en estas dos ubicaciones, alegando caos circulatorio y falta de seguridad vial y de preparación de ambas vías para soportar esta nueva afluencia de vehículos –además de sostener que es el Consistorio capitalino el que tiene las competencias para establecer las paradas en su casco urbano–. En total, y según el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Guadalajara, Juan Antonio De las Heras, hasta las 13.00 horas fueron multados cuatro autobuses que hicieron parada en el Hospital y otros 10 en el caso de Renfe, en la calle Francisco Aritio. No obstante, según De las Heras, los agentes de la Policía Local –que vigilaron durante toda la jornada ambas paradas– primero informaron a los conductores y sólo denunciaron a los que reincidieron. Sin embargo, los datos bailan, pues el alcalde de Cabanillas del Campo, Jesús Miguel, aseguraba después que hasta el mediodía habían sido multados hasta 30 autobuses sólo de la línea que comunica su municipio con la capital.
Tanto el nudo del Hospital como la calle Francisco Aritio sufrieron retenciones de tráfico a determinadas horas, retenciones de las que el delegado de la Junta de Comunidades en Guadalajara, Luis Santiago Tierraseca, culpó directamente al alcalde de la capital, Antonio Román. “Los problemas de tráfico y retrasos que se han producido esta mañana son responsabilidad exclusiva del alcalde de Guadalajara, porque hasta que ha intervenido la Policía Local las frecuencias y paradas venían realizándose con normalidad”. Tierraseca compareció junto al delegado provincial del área, Fernando Senesteva, y criticó al Consistorio por la actuación de su Policía Local. “No es de recibo, no es de sentido común”, dijo el delegado, quien considera que “el único objeto es torpedear, entorpecer y boicotear la puesta en funcionamiento de un plan que es beneficioso para los vecinos de los pueblos de la provincia”. En este sentido, Tierraseca instó a Román a haber utilizado “los instrumentos legales a su disposición” para haber mostrado su oposición a que los autobuses del Astra hagan parada en tres puntos de la ciudad, en lugar de enviar a su Policía Local, que tendrá “otras cosas más interesantes que hacer”. Tanto Tierraseca como Senesteva sostuvieron que es la Consejería la que tiene las competencias en la materia e instaron a los conductores y a las empresas concesionarias a recurrir las multas En este sentido, Tierraseca anunció que se tomarán las “medidas legales oportunas”, aunque espera no tener que llegar a ese punto, mostrándose “abierto” a volver a sentarse con los responsables municipales para resolver el asunto, aunque no mediante “el chantaje de las inversiones”, advirtió.
A su juicio, lo que el Ayuntamiento de Guadalajara debe hacer es dejar que el Plan Astra “empiece a funcionar y, si hay alguna dificultad, sentémonos a ver cómo podemos corregirlo”. En su opinión, “no se entiende” que autobuses que venían parando en Renfe sin problema, ahora sean multados por formar parte del Plan Astra. En este punto, Senesteva añadió que “estos autobuses estaban realizando estas paradas con anterioridad; lo que ha hecho el Plan Astra ha sido venir a normalizar esa situación”.
De las Heras y la concejala del área, María José Agudo, también anunciaron que tomarán medidas legales ante una resolución –la que aprobó el pasado 6 de abril la Consejería– que consideran que es “papel mojado sin ninguna validez”. Primero la recurrirán, señaló De las Heras, y “si ese recurso no prospera nos iremos al Contencioso-Administrativo”. Ambos ediles se mostraron preocupados por la seguridad vial de peatones y conductores de la ciudad y consideran que la adecuación de Francisco Aritio y el entorno del Hospital no es un chantaje, sino una “obligación” de la Junta. Asimismo, aseguraron que la Policía Local seguirá multando a quien infrinja la ordenanza municipal de circulación.