El Ayuntamiento capitalino declara la guerra a los grafiteros
El brote de actos vandálicos sucedido hace tan sólo una semana ha sido el detonante para que la Concejalía de Limpieza haya declarado una nueva guerra a los grafiteros. Al incremento de las medidas de limpieza se unirá un mayor control policial durante los fines de semana y, en breve, la Ordenanza de trabajos en beneficio de la comunidad, que pondrá penas a los autores de las pintadas.
El Ayuntamiento será implacable con los autores de las pintadas que afean la ciudad. Así de contundente se mostró ayer el concejal de Limpieza del Ayuntamiento de Guadalajara, Lorenzo Robisco, después del brote de actos vandálicos registrado hace algo más de una semana, y materializados en una serie de garabatos en fachadas de edificios del centro de la ciudad y otros espacios públicos, como el recién inaugurado parque de Adoratrices.
La particular cruzada municipal a los grafiteros se recrudecerá con la férrea vigilancia que ejercerán policías vestidos de paisano durante los fines de semana y la entrada en vigor de la Ordenanza de trabajos en beneficio de la comunidad, apuntó María José Agudo, concejala de Seguridad.
Junto a la labor de limpieza de grafitis, el Ayuntamiento de Guadalajara proseguirá paralelamente con las limpiezas integrales de los barrios, actuación que está obteniendo un grado de satisfacción importante, según comentó Robisco. A los barrios que ya han sido objeto de un evidente lavado de cara, tales como La Chopera, Manantiales, Casas del Rey y calle Mayor, le seguirán en los próximos días la zona de la Concordia, las calles Arrabal del Agua, Chorrón, Medina y San Roque. Junto a estos enclaves se trabajará próximamente en los nuevos desarrollos, así como en los barrios anexionados y El Clavín.
Asimismo, y como respuesta a las críticas vertidas hace unos días por el Grupo municipal Socialista en torno a los juegos infantiles, Robisco señaló la importante actuación realizada por el actual equipo de gobierno en materia de infraestructuras lúdicas destinadas a los más pequeños. Un ejemplo de ello es que el año 2009 destacó por ser uno en los que más juegos se instalaron en Guadalajara, en zonas como Manantiales, Adoratrices, Escritores, el parque de San Juan Bosco o Rufino Blanco. A estos se les vienen a sumar los instalados en años previos, como los de la avenida de Castilla, Laguna Grande o Las Lomas, y los pre existentes en los nuevos desarrollos, como la ampliación de Aguas Vivas o el remate de Las Cañas.