El Ayuntamiento de Molina defiende la ubicación de la futura estación de autobuses

24/01/2011 - 00:00 Javier López

 

El alcalde de Molina de Aragón, David Pascual, se reunió el pasado viernes con un grupo de vecinos descontentos por la futura ubicación de la nueva estación de autobuses, al final de la calle San Juan, que ya se encuentra en construcción. El primer edil fue contestando a las reivindicaciones de los vecinos, que habían recogido 600 firmas que apoyaban su propósito. Entre ellas destacan los problemas de tráfico que según ellos acarrearía dicha ubicación, así como las dificultades existentes en la recogida de aguas, que se agravarían con el nuevo edificio. En el acto también estuvo el delegado de Servicios de la Junta, Carlos Sanz, que también ayudó a aclarar las dudas sobre el proyecto.
Ante la presentación de varias alegaciones en contra de la ubicación de la nueva estación de autobuses en la localidad, avaladas por unas 600 firmas, el alcalde de Molina de Aragón, David Pascual, acompañado de Jaime Muñoz y Carlos Sanz, concejal de Economía y delegado de Servicios respectivamente, expuso las razones de la implantación del espacio multifuncional al final de la calle San Juan el pasado viernes a las 20.00 horas en el salón de actos de Santa María del Conde. En primer lugar Pascual aclaró que en la reunión previa con algunos afectados, les comunicó que la decisión se tomó por acuerdo de la Comisión de Gobierno municipal, “no en Pleno, lo cual lo asumo y por ello rectifico”. La ubicación de la estación de autobuses, cuyas obras están en marcha, se valoró por ser uno de los puntos centrales de la localidad y estar próximo a la zona comercial y de edificios públicos, para que las personas que se desplazan hasta la localidad utilizando el transporte zonal, como los que utilizan el transporte de viajeros de la empresas Agrega y Samar, tengan el mínimo desplazamiento cuando tengan que realizar sus gestiones. En cuanto a la regulación del tráfico y circulación en la zona, el alcalde contó que la nueva estación no lo alterará, según el proyecto que redactó la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y que es público. Quedaría regulado el tráfico de vehículos y de peatones en la zona, según los informes de la Policía Local. Contaría con acceso a minusválidos, señalización horizontal como vertical, badenes de reducción de velocidad, etc. Todo ello perfectamente señalizado. En este punto, una vez acabada la exposición, los vecinos expusieron que se podría realizar una gran rotonda que regulase mejor el tráfico, como puerta de entrada al Parque Natural del Alto Tajo. Pascual afirmó que “si es verdad que ha habido accidentes en esa zona, pero tal y como está planteado, trataremos de que haya menos accidentes; y si los hay, será por imprudencia de las personas”. Otra de las alegaciones que realizaron los vecinos fue el tema de inundaciones y recogida de aguas pluviales que iba a ser más agravante el problema con la nueva estación ubicada ahí. Dichas inundaciones que se producen son un problema que existe ya y ha existido mucho tiempo, no es un problema que va a crear la nueva estación de autobuses, según los técnicos. Pascual argumentó que, técnicamente, no va a aumentar demasiado el problema porque “tendrá salida por ambos lados. No obstante, me comprometí a cambiar las tuberías y ponerlas de más diámetro, e incluso, a poner más rejillas de evacuación”. Este problema es un tema municipal que tiene que resolver el Ayuntamiento, “no es un tema que viene ocasionado con la ubicación de la estación, puesto que existe ya cada vez que llueve mucho, no va a generarse de nuevo”, aclaró el mandatario molinés explicando que aprovechando las obras, se tratará de solucionar ese aspecto en su gran medida. Otro aspecto que se trató en dicha reunión fue aclarar el posible estacionamiento de los vehículos pesados que, hasta que dieron comienzo las obras, aparcaban ahí. Pascual comunicó a los presentes que mantuvo una reunión con los conductores de dichos vehículos y éstos le propusieron que una solución seria ubicar sus vehículos donde actualmente estacionan los autobuses, “a lo que les conteste que lo tendría que valorar con el equipo de Gobierno y técnicos”, explicó Pascual, argumentando que de momento no hay nada seguro y se está valorando desde el equipo de Gobierno qué alternativas existen para desfavorecer al mínimo a todos los ciudadanos en general. La falta de luz solar en las viviendas cercanas, puesto que habrá un edificio delante, no va a existir al cien por cien, porque no va a ser un gran edificio, es traslucido en su gran mayoría como se observa en el proyecto, según explicó Carlos Sanz, en representación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y trasmitiendo los datos técnicos del proyecto. Al término de la reunión, varias personas del público explicaron otras posibles ubicaciones dentro del casco urbano, además de comunicar a los responsables municipales la situación legal del terreno donde se están ejecutando las obras.